Todo lo necesario por si vuelve Filomena

El año pasado por estas fechas ya habíamos sufrido a Filomena, bautizada con ese nombre, que significa hija de la luz, por la Agencia Española de Meteorología (Aemet). La llegada de esa «borrasca profunda europea» afectó a la mayor parte de la Península entre los días 6 y 11 de enero de 2021. Muchos lugares quedaron aislados e incomunicados a consecuencia de la gran cantidad de nieve acumulada y a los estragos que causó la nevada, y no se recuperó la normalidad hasta días después.

Así fue hace un año y ahora apuntan que nos aguarda otra Filomena. Podríamos consultar las previsiones de la Aemet, pero a la mayoría le gusta más basarse en otras cuestiones menos científicas, como las estimaciones de un chaval de 15 años llamado Jorge Rey. Desde que el pasado año acertara con su previsión de Filomena, este adolescente, apasionado de la previsión meteorológica desde los 7 años, se ha convertido para muchos en la principal autoridad en la materia.

Jorge Rey nació en Burgos y reside en un pequeño pueblo burgalés de unos 200 habitantes llamado Monasterio de Rodilla, a 25 kilómetros de la capital de una provincia donde saben muy bien lo que es el frío. Para pronosticar el tiempo, el chico toma como referencia un método utilizado por los pastores que se conoce como Las Cabañuelas. Consiste en la observación de la naturaleza durante los 24 primeros días del mes de agosto. Con ello logra diagnosticar el tiempo que habrá el resto del año. El chaval tiene su propia web meteorológica, El tiempo con Jorge Rey, y allí ha anunciado que este 2022 llegará una nueva Filomena el 24 de enero, con fuertes nevadas en cotas bajas.

Estamos preparados

No debemos confundir, ojo, al aprendiz de meteorólogo Jorge Rey con el presunto pitoniso Sandro Rey, que en marzo de 2018 pronosticó que la edición de Operación Triunfo de ese año la ganaría «una mujer rubia de ojos y piel clarita» y en diciembre ‘se confirmó’ que la había ganado un hombre negro de por entonces 19 años llamado Famous Oberogo, de ascendencia nigeriana y afincado en Sevilla.

En todo caso, si este año vuelve Filomena -o como decidan llamarla- ya no será como en 2021. Hemos aprendido, estamos escarmentados y preparados. Si el frío y la nieve a raudales deciden visitarnos de nuevo, sabremos qué hacer y tendremos todo lo necesario, no como entonces. Estos son algunos productos, hace un año revolucionarios, para hacer frente a Filomena 2022 y los pasos a seguir para que esta vez no nos altere el paso de una «borrasca profunda europea».

La pala, que no falte

Las palas fueron a Filomena lo que el papel higiénico al confinamiento. Todo el mundo trató de conseguirlas y luego muchos se juntaron con varias en casa, aunque las acabaron usando menos que el papel. Es un producto básico ante las nevadas y para esta segunda Filomena tenemos dónde elegir. Hay palas de colores para los más pequeños desde 1,66 euros, profesionales de gran capacidad por 15,04 y por 10,17 euros están las de acero de carbono plegables, por si la quieres llevar en el bolso. Porque, aunque solo sea un rato, bajar a la calle a pegar unas paladas con el artefacto adecuado no tiene precio.

Calor corporal por app

Si caminas por la nieve con este equipamiento puesto corres el riesgo de fundir la nieve a tu paso. No solo por los calzoncillos térmicos Cai Kelun, sobre todo por los calcetines «auto-calefacción magnética» y por el traje con control de temperatura desde el móvil a través de una app. También hay sacos para niños y monos muy fashion para mujeres.

El gorro habla por ti

El gorro es un complemento básico para las nevadas y además es un elemento muy socorrido porque hay modelos de todo tipo, para todos los gustos y circunstancias. Está el gorro de lana con gafas incorporadas, el modelo Asalto al Capitolio, el de ganchillo que imita a Shrek o el clásico ushanka ruso de «piel de mapache auténtico y piel de cordero». Pero sin duda el más llamativo es el «gorro de pelo corto» o «bitch landlord hat», pensado para calvos incluso sin nieve. Sobre este gorro de pelo, además, se puede colocar otro gorro y disponer de un doble calentamiento de cabeza. Además, un gorro característico te distingue en mitad de la nieve.

Movilidad básica

Moverse después de la vista de Filomena era una aventura. Entonces unos metros parecían kilómetros y lo que siempre había estado cerca ya no. La nieve y los resbalones impedían avanzar porque no llevábamos el material adecuado. Por eso ahora unos elementos básicos en todo hogar han de ser los crampones, a ser posible acompañados de bastones, o mejor unas raquetas. Crampones hay muy básicos, quizás demasiado para 6,90 euros. Por poco más, existen otros más aparentes, aunque tienen buena pinta los que solo cuestan 75 céntimos en Aliexpress. Las raquetas son mucho más caras. Bastones telescópicos ultraligeros encontramos por 8 euros y pueden acompañarse con un «hacha de hielo», por lo que pueda pasar.

Movilidad avanzada

Para movilidades más avanzadas es posible encontrar en Internet un papiro que se convierte en trineo o bien una cuña, aunque llama más la atención el trineo «140KG» que anuncia un chino en chanclas. Y si el deslizador improvisado o el de siempre se quedan cortos y echas de menos el patinete, quizás sea el momento de emplear uno al que se le pueden incorporar unos esquíes en las ruedas o bien mirar cómo anda el coche. Hay un rascador de hielo «mágico» de menos de dos euros muy bien valorado o unas ‘cadenas’ de 67 céntimos la unidad, aunque las cadenas deben estar homologadas. 

Todo en orden

Con todos estos complementos, bien empleados, no hay Filomena que preocupe. Podremos brindar para celebrarlo con «Filomena» un «licor de sangría» a base de «vino tinto, alcohol, aromas adicionales de fruta y azúcar». Y ya hasta el año siguiente.