Acciona Energía compra un proyecto fotovoltaico en Estados Unidos de 400 millones
Tendrá una capacidad nominal de 350 MW de energía solar, suficiente para cubrir las necesidades de 66.500 hogares en la región de Texas
Acciona Energía ha comprado un proyecto fotovoltaico de 350 megavatios (MW) en Estados Unidos, que requerirá de una inversión estimada de 407 millones de euros, convirtiéndose en la mayor instalación solar de la compañía en todo el mundo.
Se trata de la planta Red-Tailed Hawk, ubicada cerca de Houston (Texas), antes propiedad de Avondale Solar y Solar Plus Development y promotores del proyecto a través de su filial AP Solar Holdings, según ha informado la compañía española en un comunicado.
La construcción comenzará en el tercer trimestre de 2022 y la planta estará plenamente operativa a principios de 2024, cuando quede conectada al nudo de red de Houston, con unas previsiones que apuntan a una elevada demanda y capacidad de inyección.
En concreto, tendrá una capacidad nominal de 350 MW de energía solar fotovoltaica, suficiente para cubrir las necesidades energéticas de 66.500 hogares en la región. El proyecto generará unos 400 empleos durante la fase de construcción y 15 puestos fijos una vez que esté operativo.
Además, formará parte del programa de Gestión del Impacto Social de Acciona, que reinvierte una parte de los ingresos anuales de sus instalaciones para mejorar la formación, el bienestar y la gestión medioambiental de las comunidades donde opera.
«Estamos encantados de continuar nuestro crecimiento en Texas, donde ya tenemos tres parques eólicos operativos y en breve contaremos con dos proyectos solares en construcción», ha señalado el consejero delegado de Acciona Energía Norteamérica, Joaquín Castillo.
Red-Tailed Hawk será el tercer proyecto fotovoltaico de la empresa en Estados Unidos, donde ya ha comenzado la construcción de otras dos plantas solares: Fort Bend (315 MWp) en Texas y High Point (125 MWp) en Illinois.
Además, la compañía es propietaria y opera diez parques eólicos con más de un gigavatio (GW) de capacidad y la planta termoeléctrica de Nevada Solar One, de 64 MW. Una vez completadas las que están en construcción, contará con más de 2 GW de capacidad fotovoltaica, termosolar y eólica en Estados Unidos.