Los autónomos apoyan la propuesta del Gobierno sobre sus prestaciones

La Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA) ha informado este lunes de su respaldo a la propuesta del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones sobre la transición en las prestaciones para este colectivo, dado que está previsto que terminen el 28 de febrero.

ATA ha asegurado en su cuenta de Twitter que «ha llegado a un acuerdo» con la cartera que dirige José Luis Escrivá, que contempla mantener la prestación extraordinaria por cierre administrativo, en caso de que se dé en algún sector o se produzca un nuevo repunte de los casos de coronavirus.

ATA también ha dado el visto bueno a la eliminación de la prestación extraordinaria y ordinaria ligadas al coronavirus y al establecimiento de la exoneración de cotizaciones para los 110.000 autónomos que ahora están cobrando cese. Estas serían, de marzo a junio, del 90%, 75%, 50% y 25%.

Además, la propuesta incluye una prórroga de la prestación extraordinaria para los autónomos de La Palma, afectados por la erupción volcánica de septiembre.

Conversación con todas las asociaciones

El Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones «está hablando con todas las asociaciones para hacerles propuestas hacia una transición», como han señalado fuentes de la cartera consultadas por Europa Press.

Otras asociaciones, como la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA), consideran que las prestaciones deberían prorrogarse durante tres meses más para los autónomos en paro total.

Por su parte, la Unión de Asociaciones de Trabajadores Autónomos y Emprendedores (Uatae) sostiene que no ha recibido «ninguna propuesta por escrito del Gobierno». «Estamos ya en una situación muy apurada de plazos como para abordar el tema así», han comentado a Europa Press.

Las prestaciones para los trabajadores por cuenta propia expiran en una semana, por lo que desde Uatae plantean un plazo hasta el 31 de marzo para «valorar si hay algún sector singularmente afectado, como el de las agencias de viaje, que precise una prórroga específica de la prestación extraordinaria».

Desde el momento de mayor impacto de la pandemia hasta ahora, la Seguridad Social ha protegido a 1,46 millones de trabajadores por cuenta propia y se han abonado en este tiempo unos 7.900 millones de euros en prestaciones. A eso se suman más de 3.700 millones en exoneraciones de cuotas aplicadas a los trabajadores autónomos con ayudas, según los datos publicados al cierre de enero.

La Seguridad Social abonó ese mes una nómina estimada de 88,4 millones de euros en prestaciones a más de 108.000 autónomos, entre los que se encontraban tanto los afectados por la pandemia como por la erupción volcánica en La Palma.

La nómina estimada de enero destinó 64,120 millones de euros a unas 84.800 personas beneficiadas con la prestación por bajos ingresos. También recogió una partida de 23.280 millones de euros para prestaciones compatibles con la actividad por cuenta propia, destinadas a unas 22.600 personas.

Asimismo, contemplaba un monto de 178.000 euros para los 200 autónomos obligados a suspender su actividad por resolución administrativa y otra partida similar para los 100 autónomos beneficiarios de prestaciones procedentes de los Reales Decretos anteriores. La nómina de enero incluía 36.000 euros en prestaciones para 60 trabajadores de temporada, además de una ayuda de 620.000 euros para los 700 afectados por la erupción volcánica en La Palma.

Nueva reunión sobre el sistema de cotización

El Gobierno y los agentes sociales se encuentran reunidos esta tarde para seguir avanzando en el nuevo sistema de cotización para autónomos.

En el último encuentro, celebrado la semana pasada, el Ministerio propuso una reducción de las cuantías en los tramos más numerosos, para los trabajadores por cuenta propia con rendimientos de entre 900 y 1.500 euros. También recogía otros reclamos de este colectivo, como la modificación del concepto de rendimientos netos y la posibilidad de descontar algunos gastos a los autónomos.

La Seguridad Social planteó la posibilidad de introducir mejoras en el cese de actividad ordinario y la creación de una extraordinaria, similar a la introducida con la nueva reforma laboral.

La propuesta del Ejecutivo volvió a encontrarse con el rechazo de las asociaciones de autónomos.