Cuáles son las tarifas de luz 'más baratas' en el mercado libre: a partir de 90 euros al mes
La más económica es una de Total Energies denominada ‘A tu aire siempre’
Las comercializadoras eléctricas ofrecen tarifas en el mercado libre que no bajan de los 90 euros al mes para un consumidor medio. En concreto, según el comparador de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), la más económica es una de Total Energies denominada A tu aire siempre.
El importe anual sería de 1.087,15 euros para un cliente con una potencia contratada de 3,45 kilovatios (kW) y un consumo medio de 3.500 kilovatios hora (kWh), lo que supone una factura mensual de 90,6 euros. Esta tarifa no incluye discriminación horaria y el término de potencia para todo el día es de 0,090273 euros por kilovatio, mientras que el kWh consumido se cobra a 0,269758 euros.
Además, continuando con el listado de Competencia, la segunda tarifa más asequible dentro del mercado libre también es de la compañía de origen francés. Se llama A tu aire programa tu ahorro y sale por 1.088,5 euros al año, es decir, 90,7 euros al mes. En este caso sí se divide el consumo en horarios punta (0,334022 €/kWh), llano (0,262230€/kWh) y valle (0,235933€/kWh).
De su lado, la tercera tarifa más económicas es el Plan online de Iberdrola. Serían 1.096,05 euros por ejercicio o, lo que es lo mismo, 91,33 euros al mes. Hay que recordar que También recalcar que, en la actualidad, se aplica un IVA reducido a la electricidad del 10% para todos los consumidores con potencia contratada de hasta 10 kW, ya sean particulares o empresas y siempre que el precio en el mercado mayorista se mantenga por encima de los 45 €/MWh. Asimismo, está suspendido el impuesto a la generación del 7% y está reducido al mínimo que permite Europa el impuesto especial sobre la electricidad (del 5,11% al 0,5%).
Recalcar también que en las tarifas del mercado libre se pueden aplicar descuentos, combinar suministros (luz y gas) y suelen ser mucho más estables de cara al consumidor, aunque también se corre el riesgo de que la empresa infle el precio. De hecho, se sabe de antemano cuánto se va a pagar, pero también presenta la parte negativa de que exige al consumidor una mayor atención a la hora de contratar su tarifa (ya que cada una se adapta a un determinado tipo de consumo) y que puede ser revisada a lo largo del tiempo.
La tarifa regulada cambia cada día
De su lado, la PVPC (Precio Voluntario al Pequeño Consumidor) cambia cada día y cada hora en función de lo que dicta el mercado mayorista (pool en la jerga). La volatilidad del mercado ha provocado que 1,25 millones de consumidores se pasaran de la tarifa regulada al mercado libre en 2021, frente a los 575.000 de 2020 y los 660.000 de 2019.
Según el comparador de la CNMC, la cantidad que habría pagado un consumidor medio —como el descrito al principio— acogido al mercado regulado sería de 1.331,88 euros al año (108,49 euros al mes) del 13 de abril de 2021 al 12 de abril de 2022. Subrayar que el precio de la electricidad no comenzó a dispararse hasta entrado el verano del curso pasado y que ahora la situación se ha visto muy agravada por la invasión de Rusia a Ucrania, llegando el 8 de marzo situarse el megavatio hora (MWh) en 545 euros.
La tarifa regulada fue introducida por la Ley del Sector Eléctrico de 2013 y se regula por Real Decreto 216/2014, y los consumidores tienen contrato comercializadoras de referencia (COR), designadas por el Transición Ecológica, y una potencia contratada no superior a los diez kW.
Ribera pretendía mejorar la PVPC
En octubre del año pasado, el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico lanzó una consulta pública para modificar el PVPC. El departamento de Ribera pretendía recabar propuestas para reducir la volatilidad del PVPC y optimizar su diseño con vistas al proceso de transición energética. Una idea era indexarla al mercado de futuros, pero bajo la coyuntura actual de crisis energética no tendría sentido.
Ahora, las eléctricas advierten de que el mecanismo planteado por el Gobierno para limitar el precio del gas para generación eléctrica encarecerá la electricidad para los clientes del mercado libre, que reúne al 80% de la demanda eléctrica nacional. Según fuentes de Endesa citadas por Efe, el tope al precio del gas que proponen España y Portugal para intentar bajar el precio de la electricidad en el mercado mayorista se ha diseñado solo para beneficiar a una parte de los consumidores: los clientes que tienen la tarifa regulada y a las grandes industrias que se han mantenido indexadas al pool.
Las mismas fuentes subrayan que se perjudicará así a los «clientes más previsores», con contratos a precios fijos, una información que adelantó CincoDías. Desde la compañía que dirige José Bogas consideran que se producirá una «transferencia de rentas injusta» para intentar paliar la subida del PVPC, que es el precio que computa en el Índice de Precios de Consumo (IPC) porque el Instituto Nacional de Estadística (INE) no tiene en cuenta los precios de los contratos del mercado libre.
Aelec, patronal de las grandes eléctricas que integra a Iberdrola, Endesa y EDP, viene defendiendo desde hace tiempo la necesidad de acabar con el PVPC. En esta línea PwC, asegura que la existencia de este tipo de tarifas reguladas, especialmente cuando abarcan cuotas elevadas de consumidores, «puede generar importantes barreras de cara a la fijación de precios de una manera eficiente, además de obstaculizar el desarrollo de la Transición Energética».
Promesa de Pedro Sánchez
Actualmente, es la tarifa regulada la que permite que los consumidores vulnerables se beneficien del bono social eléctrico. La consultora expresa que España necesita alinear sus mecanismos de protección al consumidor vulnerable estableciendo una tarifa con precio fijo reducido y financiada a través de los Presupuestos Generales del Estado (PGE), otros ingresos regulados del sector eléctrico, o mediante mecanismos el sector energético que «no sean discriminatorios entre los agentes».
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, prometió que todos los ciudadanos iban a pagar en 2021 un recibo eléctrico similar al de 2018 descontando el IPC. Según datos publicados ayer por Eurostat, los precios abonados por los consumidores domésticos medios —incluyendo todos los impuestos— fueron de 0,243 €/kWh en 2018 y de 0,257 kWh en 2021.
Si al precio de 2018 se le aplica el incremento de inflación entre diciembre de 2018 y diciembre de 2021 (del 6,8%), queda un precio para 2018 ajustado por la inflación de 0,2595 €/kWh, superior del año pasado. No obstante, para poder cumplir con la promesa de Sánchez, el Ejecutivo ha sacado un promedio tanto de los hogares que están acogidos al mercado regulado como de los que están en el mercado libre. Además, sitúa el consumo medio anual entre una horquilla de 2.500 kWh y 5.000 kWh.