El FMI recomienda a los gobiernos que afronten la crisis reduciendo la deuda pública
«Las políticas para atajar los precios de alimentos y energía no deben sumar demanda agregada», advierte el Fondo Monetario Internacional
El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha recetado a los gobiernos que deben apoyar a los hogares vulnerables en la actual situación de elevada inflación, pero que deben evitar medidas fiscales que aumenten la demanda agregada porque eso iría en contra de la política monetaria.
«Los políticos deben proteger a las familias de bajos ingresos de grandes pérdidas de ingresos reales y asegurar su acceso a alimentos y energía. Pero también deben reducir las vulnerabilidades de grandes deudas públicas y, en respuesta a la elevada inflación, mantener una política fiscal ajustada para que no se cruce con la política monetaria», ha afirmado el organismo este miércoles.
Ante los elevados niveles de deuda pública, que llegará al 91% del PIB global este año, 7,5 puntos por encima de los niveles prepandemia, los gobiernos deben priorizar el apoyo a los ciudadanos vulnerables mediante las redes de seguridad social.
No obstante, el Fondo considera que se debe permitir a los precios de la energía que se ajusten para preservar los incentivos de limitar su uso y elevar la demanda. En el entorno actual, el organismo considera que los subsidios, rebajas de impuestos o límites de precios para atajar las facturas energéticas serán medidas costosas a nivel presupuestario e ineficaces.
«Las políticas para atajar los precios de alimentos y energía no deben sumar demanda agregada. Las presiones de la demanda obligarían a los bancos centrales a elevar aún más los tipos de interés, haciendo más cara la deuda pública», ha alertado el FMI.