Estos son los requisitos para acceder al 'cheque-gasolina' de 100 euros
El descuento de 20 céntimos, a partir del 1 de enero, solo seguirá estando disponible para los transportistas
Las medidas aprobadas por el Gobierno de España para hacer frente a las consecuencias de la guerra de Ucrania finalizan el 31 de diciembre. Aunque el Ejecutivo va a prorrogar algunas de estas ayudas, el descuento de 20 céntimos en la gasolina a quienes ganan más de 2.000 euros netos a mes no está en esa lista. Esto supondría que esta ayuda solo beneficiaría a una parte de la población, pero la previsión es ayudar de alguna forma a las personas que menos ingresan.
Algo a tener en cuenta es que Moncloa es consciente de que parte de la bonificación de estas ayudas ha ido a mantener los márgenes de las empresas. Además, ha beneficiado más a las rentas altas, ya que las bajas usan más el transporte público y suelen tener coches más pequeños.
Ya no beneficiará a toda la población
El contenido del nuevo decreto será básicamente el mismo, pero el Ejecutivo analizará si son necesarios cambios o mejoras. Así lo han asegurado fuentes de la cúpula económica del Gobierno a Confidencial Digital. Uno de los principales ajustes del decreto será, por tanto, esta ayuda al precio de la gasolina.
La apuesta de Moncloa pasa por prorrogar el sistema de apoyo a los consumidores de combustible de automoción, como son los transportistas, pero sin que beneficie a toda la población en general. El objetivo es centrar estas ayudas en las familias y aquellas personas que más las necesiten por sus niveles de renta.
El sistema que buscan desde el Ejecutivo es algo parecido a una tarjeta o un cheque, de forma que sea posible concentrar el esfuerzo fiscal en ayudar a aquellas familias cuyos ingresos sean más bajos. Además, se utilizará para canalizar ese pago el ‘cheque-alimentación’ de 200 euros a las familias que ingresan menos de 1.000 euros al mes. Será una ayuda parecida al cheque del pasado verano para las personas físicas de bajo nivel de ingresos y patrimonio, ya fueran asalariados, autónomos o desempleados.
No recibirán esta ayuda quienes ganen más de 2.000 euros al mes
El plan que el Gobierno está valorando en estos momentos apuesta por compensar con una especie de ‘cheque-gasolina’ a 10 millones de españoles. Es decir, el 70% de la población del país, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), que son quienes ganan menos de 2.000 euros netos al mes.
Esta ayuda será de carácter puntual (es decir, un solo pago) y será de una cuantía que rondará los 100 euros, aunque esto aún está en proceso de debate, según señalan desde Hacienda a El Confidencial Digital. Esta decisión excluye, por tanto, a unas 17 millones de personas del total de 27 millones de conductores que hay contabilizados en España, según datos de la Dirección General de Tráfico (DGT).
El pago del cheque será automático
La idea es que este pago único sea automático y llegue a los trabajadores asalariados, a los parados, los autónomos o los jubilados que tengan unos ingresos mensuales por debajo del máximo fijado. Aún no se sabe cuál será el coste de esta medida para las arcas del Estado, ya que dependerá de la cantidad final que fijen para el llamado ‘cheque-gasolina’. Por otra parte, el Gobierno descarta una bajada de los impuestos a los carburantes porque asegura que «resulta costosa» e inasumible para las arcas del Estado.
Las críticas a la bonificación de la gasolina
Desde la puesta en marcha del descuento a los carburantes este ha recibido múltiples críticas por ser extensivo a todos los ciudadanos, independientemente de su nivel de ingresos. El Banco de España también se ha sumado a estas opiniones y, a través de su informe anual, criticó que la medida era un «desperdicio de recursos».
«Es una medida muy genérica, que posiblemente tenga incluso un carácter regresivo, dado que los hogares de menores rentas probablemente tengan un menor consumo de esos productos”, advirtió. Además, destacó que después de hacer «estimaciones preliminares» con respecto al descuento concluyeron «que la inflación soportada por los hogares de mayor renta podría reducirse de forma más intensa que la enfrentada por los hogares de menor renta». Es decir, que la medida estaba beneficiando más a los hogares con mayor poder adquisitivo que a aquellos con rentas más bajas.