Ana Botín reduce un 93% las pérdidas de su brazo inversor y esquiva su disolución
Su ‘holding’ Pérgamo limita a 1,38 millones el resultado negativo en 2022 y toma medidas para equilibrar su balance
La presidenta del Santander, Ana Botín | Europa Press
La presidenta del Santander, Ana Botín, redujo un 93% las pérdidas de su holding de inversiones Pérgamo el año pasado. Pese a ello, la compañía de la banquera se encuentra en una situación delicada, provocada por el agujero acumulado en la filial que atesora las acciones que tiene de la entidad financiera. Se encuentra en causa de disolución, pero está preparada para adoptar las decisiones que se precisen para sanear el balance y evitar su cierre.
Las cuentas de 2022 depositadas en el registro mercantil, a las que ha tenido acceso THE OBJECTIVE, arrojan un resultado negativo del holding de Botín de 1,38 millones de euros, frente a los 27,7 millones del ejercicio anterior, aunque el patrimonio del mismo ha pasado al rojo y se sitúa en -1,29 millones. «La sociedad presenta fondos propios negativos», explica la firma de la banquera en la memoria, en la que añade que a lo largo de este 2023 «tomará las medidas oportunas para corregir esta situación».
Botín reduce el capital de su ‘holding’ para equilibrar el balance
Este estado patrimonial es fruto de las dos reducciones de capital que Pérgamo realizó el pasado noviembre y diciembre para asumir las pérdidas de años anteriores y equilibrar el balance. La primera ascendió a 20 millones, mientras que la segunda, a 2,3 millones. Tras estas operaciones, el capital social del brazo inversor de Botín se limita a apenas 9.000 euros, según la información aportada por Insight.
Ambas reducciones las materializó antes de proceder a dos transacciones similares en Cronje, la filial en las que agrupa las acciones del Santander. En mayo de este año ejecutó dos operaciones iguales por un importe de 19 millones. En 2022 esta firma, perteneciente en un 100% a Pérgamo, volvió a resultados negativos, de 2,7 millones frente a las ganancias de 1,86 millones de 2021.
El holding de Botín además traspasó una de sus divisiones, Oquendo, dedicada a la explotación de fincas agrícolas. Esta empresa ha pasado a estar en manos de uno de sus hijos, Felipe Morenés, que figura desde principios de año como administrador único.
El brazo inversor de la presidenta del Santander cuenta como principal activo Cronje, con la que ostenta gran parte de los títulos que la banquera tiene de la entidad, fruto de las adquisiciones realizadas o de la parte de su salario que cobra en especie. Las acciones en poder de Botín alcanzan las 32 unidades. El año pasado se hizo con 700.000 papelitos por un importe de 1,9 millones de ellas a través de dicha sociedad patrimonial.
Este holding, además de ser titular de la totalidad de Cronje, ostenta las firmas Kyhecho y Kibaoni. Solo con las acciones que posee del Santander, la fortuna de la banquera sobrepasa los 110 millones de euros, a precios actuales de mercado. La cotización del banco ha escalado posiciones en los últimos tiempos al situarse en los 3,5 euros. Hay que tener en cuenta que en 2020 tocaron mínimo de 1,49 euros. Pero, llegaron a sus máximos de 13 euros en 2007, antes del estallido de la burbuja inmobiliaria y la crisis financiera.
La participación de Ana Botín en el banco es de un 0,19%, aunque la familia de origen cántabro controla más de un 1,20%. El hermano menor de la presidenta y consejero del grupo, Javier, entre acciones propias y representadas ostenta un 1,077%. Con ello, el valor de mercado de los títulos de la saga supera con creces los 600 millones en la actualidad.
El patrimonio de los Botín va más allá de su participación en el Santander, ya que cuentan con distintos activos, muchos de ellos inmobiliarios. Otro hermano de la presidenta del grupo financiero, Emilio Jr., lidera otro banco, Miraltabank, que está en pleno proceso de crecimiento para hacerse un hueco en el mercado de las empresas.
Javier, por su parte, tiene la firma JB Capital, que se decida a la adquisición de otras compañías, además de ostentar la presidencia de la Fundación Botín. La operación más relevante y sonada que llevó a cabo fue la de Vitaldent, que ha estado bajo investigación de la Justicia.
