Iberdrola frena la venta de su negocio de cogeneración en España
El reto estará ahora en buscar alternativas a este sistema, como introducir gas verde o turbinas eléctricas
Iberdrola paraliza la venta de su negocio de cogeneración en España. Así, y según ha podido saber THE OBJECTIVE a través de fuentes empresariales, la energética ha cambiado su estrategia con respecto a la su idea inicial de llevar a cabo una operación de venta de sus activos de cogeneración en España. Este sistema, que produce de forma simultánea calor y electricidad, está en el punto de mira de la transición energética por la contaminación que genera.
Desde la industria son conscientes. «Es uno de los grandes retos. Existen una serie de alternativas al gas natural, como puede ser el gas verde o la sustitución de la turbina por una eléctrica. La transformación llegará en los próximos años. El objetivo es cambiarlo, pero también hay que tener en cuenta de que ahora mismo esto no se puede parar porque la producción se paralizaría». Por otro lado, fuentes oficiales de la energética aseguran a este periódico que, con respecto al fin de la venta de su negocio de cogeneración, «su plan de desinversiones ha sido completado, como así se puede observar en los resultados del primer semestre».
El fantasma de la venta de los activos de cogeneración de la energética española lleva años sobrevolando. En 2018, muchos medios se hicieron eco de la posible venta de estos activos por parte de Iberdrola. Se cifró en varios millones de euros dicha operación. Durante los siguientes años, este objetivo se mantuvo. Sin embargo, casi un lustro después de conocerse las intenciones de la compañía con respecto a este asunto, Iberdrola da marcha atrás.
La cogeneración es una de las fuentes de energía clave para la industria de nuestro país. Grandes compañías, como por ejemplo Michelín, recurren a ella para llevar a cabo el 90% de su producción. Sin ir más lejos, la cocción de los neumáticos -que se lleva a cabo a 150 grados- necesita de una planta de cogeneración. En este caso es externa y, precisamente, es Iberdrola quien la opera. Una situación que no solo afecta a la fábrica en concreto sino también a constructores, distribuidores, mayoristas pequeños o grandes, además de a la exportación.
Según el último informe de Iberdrola (del año 2022), entre las filiales de cogeneración de la energética en España se encuentran las siguientes: Gequisa, Energía Portátil Cogeneración, Iberdrola Cogeneración y Peninsular Cogeneración.
Por otro lado, la energética tiene una capacidad instalada en España que no ha variado con respecto del ejercicio 2021, alcanzando
los 9.168 megavatios. La cogeneración representa 296 megavarios de estos. Es decir, el 3,2% del total. Además, en 2022 la producción alcanzó los 32.682 gigavatios hora. De esta, la cogeneración contribuyó con 1.714 GWh, un 14% menos que en el año anterior, donde se situó en los 1.992 GWh.
En el informe del primer semestre de Iberdrola de este año se aprecia que las únicas desinversiones realizadas en España han sido una serie de minicentrales hidroeléctricas. Entre estas destaca la de Guriezo Superior (2,32 megavatios), Guriezo Inferior (1,16 Mw), Onda (0,90 Mw), Hidro (0,35 Mw) y Villarreal (0,47 Mw) en favor de la empresa Global Capablanca S.L.U. Por otro lado, la energética publicó unos resultados que arrojaron un beneficio neto de 2.521 millones de euros durante ese periodo, lo que supone un crecimiento del 21%.
El Real Decreto Ley 10/2022 establece, con carácter temporal, hasta el 31 de diciembre de 2023, un mecanismo de ajuste de costes de producción para la reducción del precio de la electricidad en el mercado mayorista, tras su aprobación por la Comisión Europea. Mediante este mecanismo, las centrales de gas, carbón y cogeneración reciben una subvención por la diferencia entre el precio del gas en el mercado y un precio de referencia (entre 40 y 70 euros por MWh), cuyo coste será financiado por los consumidores cuyos contratos fueron firmados con posterioridad al 26 de abril de 2022, y también aquellos contratos anteriores una vez se renueven o prorroguen.
El sector de la cogeneración en los últimos meses ha hecho mucho ruido por recibir ayudas estatales tras su endeble situación. Una problemática que acabó llegando porque el Gobierno, al final, accedió a través de subvenciones. No obstante, muchas fábricas aún mantienen su equipos jurídicos preparados para conseguir aquella cantidad de dinero que no recibieron durante varios meses en los que fueron obviados por el Ejecutivo, mientras se primaban otras tecnologías.