Un licenciado en humanidades tiene una empleabilidad 20 puntos inferior a otros
También existen diferencias entre hombres y mujeres y entre universidades privadas y públicas
Apenas unos días antes de integrarse en Ciencia, el Ministerio de Universidades publicó la ‘Estadística de Indicadores de Afiliación a la Seguridad Social de los Egresados Universitarios’, correspondiente a los graduados en el curso 2017-2018. El documento es una radiografía del sistema universitario español en relación con el empleo y arroja notables diferencias entre egresados según sean hombres o mujeres, vengan de un centro público o privado, o según el área de conocimiento en el que se hayan especializado. Los datos se centran en la cohorte de egresados en el curso 2017-2018 hasta el cuarto año después de salir de la universidad.
El dato principal es el de la tasa de afiliación media a la Seguridad Social, que lleva a la cifra de los que están trabajando. Así, el 75,6% de ellos está afiliado, lo que supone 2,8 puntos más que el curso anterior.
Los datos muestran cifras superiores en tres indicadores de afiliación en los egresados de universidades privadas: especialmente, en contratados en el grupo de titulados (72,8% frente al 60%), así como en la base media de cotización (31.866 euros, 2.975 euros más que los salidos de centros públicos), pero también en cuanto al porcentaje de autónomos (11,7%, cinco puntos por encima). Por el contrario, la proporción de contratos indefinidos es algo superior en egresados de universidades públicas (62,8% frente a 59,4%).
También se observan diferencias cuando se desagregan los datos por sexo. En general, se observa que los hombres tienen una mejor afiliación que las mujeres. Concretamente, existen desequilibrios importantes en el porcentaje de contratos indefinidos (69,6%, 12 puntos de diferencia favorable a los hombres) y en la base media de cotización (30.243 euros, 1.683 más que las mujeres). Además, también es más elevado el porcentaje de autónomos entre varones. En cambio, en la tasa de afiliación media o el porcentaje de afiliados que cotiza en el grupo de titulados las diferencias no son tan significativas.
Sobre la base del número total de egresados, en la evolución de los diversos indicadores de afiliación destaca especialmente un aumento constante de la base media de cotización; desde 24.121 euros entre los graduados en el curso 2009-10 (datos del año 2014, al ser a los cuatro años de egresados) hasta 29.559 euros de los del 2017-18 (datos de 2022), es decir, un incremento del 22,5%. El aumento salarial entre egresados universitarios es superior al del total de la población (18,9% frente al 13,3%) en el período 2014 a 2021.
Por ámbitos de estudio, Informática, Salud y servicios sociales e Ingeniería, industria y construcción superan el 81% en su tasa de afiliación media al cuarto año de egresar. Por el contrario, Artes y humanidades no alcanzan el 64% y Ciencias sociales, periodismo y documentación y Negocios, administración y derecho superan ligeramente el 70%. En términos comparativos, las mayores diferencias entre tipos de universidad se encuentran entre los egresados de las universidades públicas, en Salud y servicios sociales (85,9% frente al 75,3% de las privadas) y en Agricultura, ganadería, silvicultura, pesca y veterinaria (80,3% frente a 70,3%). A favor de las privadas están los graduados en carreras de Educación: 84,6% frente al 73,5% de las públicas.
Entre ámbitos de estudio una de las diferencias más notables se encuentra en el tiempo que requiere la afiliación. En este sentido, el ámbito de Informática cuenta con tasas de afiliación media muy altas ya el primer año después de obtener la titulación. El caso contrario es el ámbito de Ciencias, cuya tasa de afiliación aumenta más de 43 puntos desde el primer hasta el cuarto año después de terminar la carrera. Esto se debe, en parte, a que los estudiantes de algunos ámbitos tienen una mayor tendencia a continuar con su formación antes de empezar a trabajar.