El fondo que acabó con Gowex acusa a Grifols de manipular sus cuentas: «Su acción vale cero»
Denuncian que la compañía «ha manipulado sus cuentas para reducir artificialmente su apalancamiento informado»
Gotham Research, el fondo que denunció el fraude de Gowex, provocó su hundimiento bursátil y posterior cierre ha publicado este martes un demoledor informe de la española Grifols. El vehículo bajista ha indicado que la compañía de hemoderivados «ha manipulado sus cuentas para reducir artificialmente su apalancamiento informado». En consecuencia, el documento sugiere no comprar sus acciones ya que -indican- «probablemente valen cero».
Gotham denuncia que la catalana Grifols tiene un apalancamiento (deuda sobre Ebitda) cercano a 10-13 veces, muy por encima de las seis veces reportadas. También indican que la consolidación de ciertos activos en estados financieros de Scranton Enterprises (un vehículo financiero de la familia Grifols) «incurre en un tratamiento materialmente engañoso e incorrecto».
«Si nuestra estimación del verdadero apalancamiento de Grifols fuera correcta, la compañía afrontaría unos costes de financiación notablemente mayores. En consecuencia, creemos que no se puede invertir en sus acciones ya que probablemente valen cero», concluyen.
Cuentas consolidadas
Tras analizar las cifras reales de obligaciones de deuda de Grifols («no las de pasivos financieros») e incluir préstamos importantes no revelados, Gotham City Research estima que el Ebitda sería un 32% menor al declarado en los resultados oficiales y calculan una deuda para la compañía de 920 millones superior a la reconocida. El Ebitda reportado de los nueve primeros meses fue de 880 millones, mientras que la deuda se situó en los 9.540 millones de euros, 6,7 veces estos resultados operativos.
Por su parte, Grifols ha negado «categóricamente» estas acusaciones. «Como empresa comprometida con la transparencia, integridad y conducta ética, negamos y rechazamos categóricamente cualquier acusación de prácticas contables o de información erróneas de nuestros estados financieros consolidados», ha señalado la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
«Grifols, como empresa cotizada, informa y divulga plenamente toda la información pertinente relativa a todas sus transacciones significativas con el máximo nivel de integridad y transparencia para reflejar una visión exacta y justa de sus estados financieros consolidados», ha indicado minutos después de que se publicase el informe.
Venta de BPC Haema
Gotham parte del análisis de que Grifols consolida en sus cuentas todo el valor, tanto de las sociedades Haema como BPC Plasma, pese a poseer el 0% de cada compañía. Haema y BPC son claves para Grifols, ya que representan aproximadamente el 40% de las ganancias de la compañía procedentes de participaciones de empresas no controladas.
Por otro lado, Scranton Enterprises, la patrimonial de la familia Grifols, también consolida completamente BPC Plasma y Haema, al igual que Grifols. En su caso, las ganancias de estas entidades parecen representar más del 100% de las ganancias de Scranton, pese a que esta última solamente posee el 8,4% de la catalana.
El apalancamiento de Grifols es de 6,7 su Ebitda, según sus últimos estados financieros aunque Gotham estima que está más cerca de diez o trece veces este valor, mientras que el apalancamiento de Scranton estaría más cerca de 27 veces su deuda sobre Ebitda, un parámetro que haría imposible que siga en funcionamiento.
El papel de Scranton
Del mismo modo, Grifols hizo un préstamo a Scranton de 95 millones de dólares en 2018, una transacción que parece vinculada a la venta de BPC/Haema. Sin embargo, este préstamo no se revela en los registros de Grifols y solo aparece en las cuentas de Scranton.
La presentación de cuentas de Scranton de 2021 muestra un aumento de pasivos de 59 millones de euros relacionados con “pagos anticipados de Grifols Worldwide Operations Ltd”. Esta transacción no se divulga en los registros de Grifols. En consecuencia, Gotham concluye que los accionistas de Grifols, por intereses minoritarios, poseen acciones de una entidad deficitaria y muy endeudada.
Gotham también apunta a la responsabilidad del actual CEO de la compañía. El pasado mes de febrero, Grifols designó a Thomas Glanzmann como consejero delegado en sustitución de Steven F. Mayer, que estuvo en el cargo poco más de cuatro meses. El mercado ha recibido favorablemente este cambio, pero el informe advierte que ha estado en la compañía desde 2006, por lo que ya estaba en el consejo de administración cuando se produjeron las transacciones «sospechosas» que se describen en el informe.
Cuentas de Grifols
Grifols obtuvo un beneficio de 3,32 millones de euros en los nueve primeros meses de 2023 -las últimas cuentas disponibles- lo que supuso un descenso del 98,2% respecto de igual periodo del año anterior. La empresa de hemoderivados ingresó 4.822 millones entre enero y septiembre de 2023, un 10,8% más que un año antes, mientras que el resultado bruto de explotación (Ebitda) ajustado alcanzó los 1.028 millones, con un margen del 23,2%.
Oficialmente, a cierre del mes de septiembre, Grifols tenía una posición de liquidez de 1.134 millones de euros y una posición de tesorería de 484 millones de euros. En el tercer trimestre del año, la firma se anotó un beneficio de casi 60 millones de euros, un 35,2% más, frente a los 44,5 millones contabilizados en el mismo periodo de 2022, al tiempo que elevó sus ingresos trimestrales un 3,6%, hasta 1.597 millones de euros.
El caso Gowex
El caso de Grifols inevitablente recuerda al que estalló hace una década con la empresa de wifi Gowex. Gothan reveló en julio de 2014 que las cuentas de la compañía dirigida por Jenaro García falseaba sus cuentas, algo que posteriormente reconoció la empresa generando un efecto dominó que terminó con el cierre de la sociedad y una larga batalla judicial para buscar a los responsables de la operación.
Entre las principales acusaciones vertidas por Gotham City se encontraba que lo incoherente de los honorarios abonados a su auditor (M&A Auditoría), unos 40.000 euros, en relación a los ingresos declarados por la compañía en 2013, más de 183 millones de euros. Para estos analistas, un nivel tan bajo de gastos en auditores se debía corresponder con ingresos reales inferiores a 10 millones de euros.