El Gobierno aún incumple el 95% de todo lo pactado en pandemia para mejorar la sanidad
Cuatro años después, solo se ha llevado a cabo totalmente el 5% de las propuestas
El 22 de julio de 2020, el Pleno del Congreso aprobaba con 255 votos a favor, 88 votos en contra y tres abstenciones las Conclusiones sobre Sanidad y Salud Pública del Dictamen para la Reconstrucción Social y Económica de España tras la pandemia del coronavirus. Cuatro años después, solo se ha cumplido con el 5% de las propuestas, de forma que el 95% restante se encuentran sin cumplir o cumplidas de forma parcial.
Son las conclusiones del último informe de la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (Fadsp), que señala que, cuatro años después, de las 71 propuestas aprobadas incluidas en siete apartados, solo 5,36% se han cumplido totalmente, 40,97% se han cumplido de forma parcial y más de la mitad, el 53,65%, no se han cumplido.
Para la federación, existen cuestiones «cruciales» que no se han resuelto, como la financiación, que sigue siendo «insuficiente»; el gasto farmacéutico, que sigue siendo «muy elevado» y con un crecimiento «disparatado»; el deterioro de la Atención Primaria; la falta de camas hospitalarias, especialmente de media y larga estancia; los graves problemas de accesibilidad al sistema sanitario; debilidad de los dispositivos de Salud Pública; hegemonía de los «intereses económicos privados» en la investigación; ausencia de mecanismos efectivos de gobernanza del SNS; falta de política de personal incentivadora que fidelice a los profesionales de la sanidad pública; y «privatización creciente del sistema sanitario».
El resultado, según apunta Marciano Sánchez Bayle, médico portavoz de la Fadsp, «es que nuestro sistema sanitario se está progresivamente deteriorando, poniendo en grave peligro la salud de la población y generando intolerables desigualdades en el acceso a las prestaciones asistenciales necesarias».
Propuestas sin cumplir
De esta forma, del informe se desprende como los apartados I Y VII (gobernanza y coordinación de servicios sanitarios y sociales) tienen un 0% de cumplimiento total. Solo tres superan el 10% (transformación digital, 16,6%; investigación, fármacos y vacunas, 15,18%; y recursos humanos, 12,5%).
Además, medidas tan importantes como contar con un plan de recursos humanos, poner en marcha un plan de formación en gestión y atención de epidemias y un plan de emergencia en Salud Pública, mejorar la formación y la información farmacológica de los profesionales sanitarios o recuperar a los profesionales sanitarios en el extranjero, cuatro años después, siguen «sin resultados» o «no conseguidos».
Tampoco se ha conseguido incrementar las camas hospitalarias, reforzar la Atención Primaria o asegurar una financiación sanitaria, suficiente y equitativa para el Sistema Nacional de Salud. En el caso de las camas hospitalarias, el Dr. Marciano Sánchez apunta a THE OBJECTIVE que no solo no se ha conseguido, sino que se ha producido «una disminución de las mismas».
Según datos del INE, como ya adelantó este medio, los hospitales de la Sanidad pública y privada de España han perdido más de 2.600 camas en los últimos diez años. En concreto, entre 2010 y 2021, los centros hospitalarios han pasado de 157.906 camas a 155.274 –2.632 menos–. En cuanto a las camas en funcionamiento, también se aprecia una disminución en los últimos diez años. Si en 2010 había un total de 145.135, en 2021 disminuyeron hasta las 140.060.
Respecto a la propuesta de reforzar la AP, el portavoz de la federación indica que no solo no se ha reforzado, sino que «apenas está funcionando» con graves problemas de accesibilidad a la misma. Según el Barómetro Sanitario de 2023, las listas de espera en el primer nivel se han duplicado tras la pandemia y más de la mitad de la población española reconoce que el sistema sanitario funciona de manera deficiente. Y es que el año pasado, casi el 70% de los pacientes que acudieron a la Atención Primaria en el último año esperó casi diez días para ser atendido. Una cifra récord que evidencia, un año más, las deficiencias del sistema público sanitario.
Propuestas cumplidas
Por su parte, en cuanto las propuestas cumplidas, la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública indica que no «necesariamente han redundado en una mejora del sistema sanitario público», ya que, algunas de estas, han dado lugar a «cambios mínimos».
Es el caso de la recomendación 7.6 ‘Eliminar la tasa de reposición de efectivos’, que establecía que solo una parte de las plazas vacantes por jubilación, muerte, o por otras causas pudieran reponerse. Pues bien, según la Fadsp, «no siempre ha redundado en un mantenimiento del personal preexistente. El mejor ejemplo es la Atención Primaria». Además, la federación indica que «hay una gran variabilidad entre las comunidades autónomas».
Otro ejemplo es la medida 15.2 ‘Impulsar en cada comunidad autónoma un Plan Estratégico de AP‘. «El que se haga un plan es, por supuesto, positivo; pero no supone que se cumpla. Es evidente que la situación de la AP en el país no ha parado de deteriorarse y no tiene visos de una mejora significativa, por lo que la aprobación de estos planes parece haber tenido poca o ninguna efectividad», se desprende del informe.
«El resumen es bastante negativo y evidencia que, como venimos señalando reiteradamente hace tiempo, la sanidad pública no es una prioridad para el Gobierno del país y que incluso cuando se llegan a acuerdos amplios (estas recomendaciones fueron aprobadas por PP) estos se incumplen sistemáticamente», concluyen desde la federación. Recalcan que, hoy, cuatro años después, apenas se han hecho los deberes, con solo el 5,3% de los compromisos cumplidos.