Sanidad permite 1.290 medicamentos de homeopatía pese a admitir que son una «estafa»
Mónica García ha abandonado el informe cuyo objetivo era analizar si esta pseudoterapia tiene algún beneficio
«La homeopatía es una estafa a costa del dinero y la salud de los pacientes». Así se pronunciaba este miércoles la ministra de Sanidad, Mónica García, en su perfil de X. Sin embargo, en las farmacias de nuestro país se siguen comercializando a día de hoy 1.290 medicamentos homeopáticos que han sido aprobados por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps) sin indicación terapéutica y sin demostrar su eficacia. Es la cifra correspondiente a marzo de 2023, que se incrementó en 121 productos, al pasar de 1.169 a 1.290.
Estas declaraciones de la ministra llegan tras darse a conocer una noticia que no ha pasado inadvertida. El diario especializado Redacción Médica publicaba que el departamento que ahora dirige García no tiene intención de finalizar el informe que evaluaba la eficacia de la homeopatía, impulsado en 2018. El secretario de Estado de Sanidad, Javier Padilla, justificaba esta decisión argumentando que «es un mal gasto de recursos que la ciencia diga que la homeopatía no es ciencia». «No es razonable invertir recursos públicos en evaluar cosas que sabemos que no sirven», explicaba en un foro organizado por El Español.
Sin embargo, expertos consultados por THE OBJECTIVE, aseguran que ese informe está concluido y solamente hay que publicarlo. «Me consta que todos los trabajos de investigación están hechos. El ministerio no tiene la excusa de que tiene que emplear recursos públicos. Es algo, insisto, que ya está hecho desde el principio y no tienen nada más que tomar la decisión de publicarlo», explica a este medio el abogado experto en pseudociencias Fernando Frías, que califica de «desacertada» la decisión de no hacer público el estudio.
«Es importante que el ministerio informe de las prácticas que tienen efecto sobre la salud y aquellas que son pseudocientíficas, como es el caso de la homeopatía», hace hincapié el experto, que recuerda que este documento empezó a elaborarse hace años y formaba parte del plan contra las pseudociencias impulsado en 2018 por las exministras Carmen Montón y María Luisa Carcedo (PSOE). Precisamente el pasado mes de abril, el Ministerio de Sanidad publicaba los resultados de otros estudios contra otras pseudoterapias.
Pese a que Padilla señala que «no debería estar en la farmacia lo que no está avalado por la ciencia», la realidad es que 1.290 productos homeopáticos se comercializan en las boticas de nuestro país sin evidencia científica sobre su validez y eficacia. Así, el número dos de Sanidad, mientras deja a un lado el compromiso adquirido en 2018, echa balones fuera y pasa la pelota a los farmacéuticos, interpelándoles para que no vendan estos compuestos: «Tenemos que hacer un llamamiento al profesionalismo por parte de los farmacéuticos. Ese desarrollo de la farmacia asistencial tiene que ir de la mano de la ciencia y de la evidencia científica».
Sanidad apela al «profesionalismo» de los farmacéuticos
«Yo sé que dentro de los farmacéuticos en su conjunto hay posiciones diversas a este respecto y creo que la posición que debería ganar un peso cada vez mayor es la que tenga claro que aquellas cosas que no estén avaladas por el conocimiento científico no deberían estar dentro de las farmacias; y, sobre todo, de ninguna de las maneras deberían ser indicadas por farmacéuticos cuando un paciente va de forma totalmente sincera a buscar una recomendación», agrega el secretario de Estado, que indica que el próximo año se llevará a cabo una reforma del Real Decreto de Centros y Establecimientos Sanitarios mediante el cual se combatirá las pseudoterapias.
A este respecto también se ha pronunciado el autor del borrador del polémico informe suspendido, Vicente Baos, quien señala en X no estar de acuerdo con Padilla y la decisión de no hacer público el estudio: «Cuando una práctica terapéutica está extendida, publica trabajos científicos y tiene el aval de la Unión Europea en su legislación, sí tiene sentido desmontarlo con argumentos científicos», explica el médico, que agrega: «No vale con que el secretario de Estado tenga claro que eso no es ciencia. Hay que decirlo con evaluaciones. Desmontar pseudoterapias en una sociedad crédula e ignorante en muchos casos es una labor de defensa de los ciudadanos y de su derecho a no ser engañados ni estafados». Además, Baos recuerda que este tipo de informes «son la cobertura legal para cualquier medida administrativa que tome al respecto».
Aval de la UE
Los productos homeopáticos son considerados medicamentos y, por tanto, les aplica un marco legislativo farmacéutico común de obligado cumplimiento que establece los requisitos para que un medicamento sea autorizado. En este caso, según explica a este medio un portavoz de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps), la normativa que aplica es la Directiva 2001/83/CE del Parlamento Europeo y del Consejo de 6 de noviembre de 2001, que establece un código comunitario sobre medicamentos para uso humano y define lo que es un medicamento homeopático y qué requisitos debe cumplir para su autorización.
En España, para regularizar todos estos productos homeopáticos, se publicó en 2018 una Orden Ministerial que determinaba los requisitos mínimos y el procedimiento para que se adecuaran al registro como estaba previsto en la normativa europea. Entonces, la Aemps estableció un «registro simplificado» para aquellos medicamentos homeopáticos que cumpliesen tres requisitos explicitados en la normativa. Estos son: que la vía de administración sea oral o externa, que el producto esté lo suficientemente diluido para garantizar la inocuidad del producto y que haya ausencia de indicación terapéutica particular en el etiquetado.
Desde 2010, Cochrane viene recogiendo diferentes estudios que reafirman que la homeopatía no sirve para nada. En total, casi una decena de estudios que aseguran que no tiene ninguna base científica sobre la que explicar su eficacia.