La presión del alquiler se dispara un 62% en Álava al anunciar control de precios en Vitoria
Esta capital vasca sabrá en marzo qué barrios serán declarados zonas tensionadas de vivienda
El País Vasco se ha convertido en la segunda región, después de Cataluña, en declarar ‘zonas tensionadas’ en materia de vivienda. Rentería fue, a principios de octubre, el primer municipio de esta región en ser declarado así. Esta declaración, que debe hacerla la comunidad autónoma previa petición del municipio, permitirá a este ayuntamiento topar los precios de los alquileres o fijar limitaciones reforzadas para los grandes tenedores. Una medida que recoge la Ley de Vivienda aprobada por el Gobierno el año pasado, pero que ha generado mucha polémica sobre su eficacia.
Pero Rentería no será el único. Las autoridades vascas llevan meses anunciando sus intenciones de declarar zonas tensionadas a diferentes áreas. En este sentido, cabe destacar el comportamiento de la provincia de Álava, donde más han crecido los contactos que recibe cada oferta de vivienda en alquiler en este trimestre, según los datos del tercer trimestre de 2024 del Barómetro del Alquiler, un estudio elaborado por el Observatorio del Alquiler de la fundación Alquiler Seguro y la Universidad Rey Juan Carlos y analizado por THE OBJECTIVE.
Álava ha pasado en tres meses de una presión de 76 a una de 123, esto es, el número de personas que se interesan por vivienda en alquiler en un plazo de diez días. Se trata de una provincia muy marcada por la escasez de oferta. El mercado se concentra fundamentalmente en la capital, Vitoria, que ya ha confirmado que solicitará la declaración de zona tensionada. Una decisión que ya anunció a principios del mes de octubre el concejal de Urbanismo, Borja Rodríguez.
15 semanas para la radiografía
El Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz sigue así los pasos de Rentería y prevé solicitar de manera formal la declaración de zona tensionada al Gobierno Vasco en marzo de 2025. Antes, el consistorio va a encargar un trabajo de diagnóstico sobre la situación de la vivienda barrio a barrio y pueblo a pueblo. Este informe, que esperan tener en un plazo de 15 semanas, sentará las bases para definir qué zonas serán declaradas tensionadas y, por tanto, en cuáles se llevará a cabo el control de precios.
Un control que provocará mayor tensión en el mercado del alquiler, a juicio de Sergio Cardona, analista del Observatorio. «Sí, posiblemente sí, si vemos lo que ha sucedido en Cataluña y lo que sucedió a finales del año pasado en Vizcaya, cuando anunció control de precios y provocó que la oferta cayera», apunta en conversación con este diario. El experto añade que, en el caso de Álava, la oferta de alquiler se concentra casi exclusivamente en Vitoria. «El 90 o 95% se concentra allí y la oferta ya es muy baja si se compara con la población», explica.
Si bien en el periodo analizado por este barómetro que refleja ese incremento en la presión cercan al 62% todavía no había entrado en vigor ninguna zona, las afirmaciones en este sentido podrían haber expulsado a muchos propietarios, que habrían retirado sus viviendas de estos mercados, según explican en el informe. De cara a las próximas semanas, hasta que se concreten las zonas tensionadas, «posiblemente la oferta sea aún más baja y eso aumentará la presión evidentemente sobre los precios del alquiler en la zona que, pese a que son los más bajos del País Vasco, llevan tiempo subiendo por esa caída de la oferta», apunta Cardona.
Barcelona pierde 10.000 viviendas
A nivel nacional, la oferta de vivienda en alquiler siguió cayendo en el tercer trimestre del año en unas 27.732 con respecto al periodo anterior, una cifra muy marcada por la pérdida de oferta en la provincia de Barcelona, que se redujo en unos 9.284 inmuebles, según el barómetro. «Se juntan varios factores, uno de ellos tiene que ver con población y movimientos de población. Hay provincias que siguen aumentando su número de habitantes como Madrid o Barcelona y otras de Castilla y León que pierden población», explica el analista.
Esto provoca una fuerte demanda en zonas en las que la escasez de vivienda es cada vez más intensa debido a la falta de construcción y a la incertidumbre que se está generando sobre el mercado del alquiler, que hace que los propietarios detraigan oferta. Según este barómetro elaborado por la Universidad Rey Juan Carlos, la declaración de la zona tensionada en Cataluña mantiene a Barcelona con unos niveles de presión sin precedentes, con 397 interesados por vivienda en un plazo de diez días, «una realidad que está lejos de solucionarse mientras la oferta siga cayendo en la provincia», explican. «Las políticas de control de precios han animado a muchos propietarios a optar por otras alternativas al alquiler residencial, lo que ha desestabilizado aún más el mercado», añaden en el informe.