Las inmobiliarias dejan de anunciar los pisos en alquiler ante la avalancha de demandantes
En 2024 han desaparecido del mercado más de un tercio de las viviendas de alquiler habitual
La presión que está viviendo el mercado del alquiler en las principales capitales de España está generando situaciones inéditas. Las agencias inmobiliarias aseguran que están asistiendo «con estupor» a comportamientos en el mercado nunca vistos antes. Uno de estos comportamientos supone que algunas agencias directamente no publicitan las viviendas en alquiler ante la alta demanda por cada propiedad que se pone en oferta y las listas de espera que se están generando.
«Al reconocido y clarísimo efecto de retirada de oferta de alquiler de larga estancia con motivo de la incertidumbre e inseguridad jurídica que tienen los arrendadores se une otro efecto perverso consecuencia del anterior», asegura el presidente de la Federación Nacional de Asociaciones inmobiliarias (FAI), José María Alfaro en conversación con THE OBJECTIVE. «Ante tal avalancha o presión de la demanda, con publicitar una vivienda de la misma tipología los profesionales generan contactos y demanda suficiente para alquilar cuatro o cinco más».
Una situación que pone en evidencia el nivel de la escasez de vivienda en alquiler en las principales capitales españolas, pero fundamentalmente en Madrid y Barcelona. «Las demandas de alquiler suelen ser bastante efímeras, en menos de 15 días se resuelven», añade el presidente de la patronal de agencias inmobiliarias. Por ejemplo, explica Alfaro, en Madrid una propiedad de 800 euros en la zona de Delicias puede generar en cinco días de publicidad 100 contactos. De esos cien contactos no todos pasan el filtro de condiciones y requisitos de exigencia financiera. «Pero si de esos 100 se quedan en 25, uno de cada tres de perfil validado se guarda en los registros de las inmobiliarias para los próximos inmuebles», explica.
Pérdida de productividad
Esta estrategia que están llevando algunas inmobiliarias ante la avalancha de demanda para una sola oferta responde fundamentalmente a motivos de productividad. «Publicar una vivienda en ciudades como Madrid supone recibir 15 o 20 correos y llamadas en un día. Eso hace que la productividad de los empleados caiga en picado porque tienen que estar llamando y demás», explica Alfaro. Y es que, tal y como cuentan a este diario desde una conocida inmobiliaria, los profesionales intentan responder a todo el mundo, con el tiempo que eso implica, cuando saben que no van a poder cerrar ningún acuerdo.
Por ello, utilizan las bases de datos generadas para los próximos inmuebles, pero eso hace que ya no sea necesario publicar un anuncio. «Lo único que nos genera es más tapón, más presión y más colapso de la oficina», coinciden estas fuentes. Alfaro señala que la presión es tan elevada en algunas zonas que las agencias directamente tiran de base de datos para cruzar el alquiler y se ahorran muchos disgustos. «Si yo tengo a una o dos personas en la oficina solo recibiendo llamadas diciéndole básicamente que no a la gente no es muy productivo. Además, no podemos hacer 50 visitas. Filtramos y nos quedamos con los 8 o 10 mejores candidatos y entre ellos se elige», explica.
Esta situación está generando una insatisfacción brutal, pero no solo entre los potenciales inquilinos que no consiguen encontrar una vivienda para alquilar, sino entre los propios trabajadores. «Sobre todo una frustración porque somos personas tratando con personas, a la gente le afecta porque tienes que decir que no a familias, que ya vienen rebotados de otras negativas», lamenta el presidente de FAI.
Desaparecen un tercio de las viviendas
Estos cambios en la operativa de las agencias inmobiliarias se determinan por las fuertes tensiones entre la oferta y la demanda, según lamenta el sector desde hace años. Por ello, el presidente de la Federación Nacional de Asociaciones inmobiliarias (FAI), ha lanzado un SOS ante la desaparición del mercado de más de un tercio de las viviendas de alquiler habitual durante 2024. Además, la patronal insiste en destacar «la ineficacia de las medidas aprobadas por el Gobierno central y las diferentes administraciones para hacer frente a la mayor crisis habitacional de los últimos 50 años en España».
En este sentido, recuerdan que la demanda ha crecido a un ritmo anual del 26,38% a nivel nacional, mientras que el inventario de la oferta de vivienda del alquiler de larga estancia ha caído un 36,3%, según los últimos datos reportados por las agencias inmobiliarias a FAI.