Las bajas por incapacidad temporal se disparan en la distribución un 58% desde la pandemia
El número de procesos de bajas laborales por contingencias comunes se situó en 2024 en 353.880 procesos
Centro comercial.
El aumento de las bajas por contingencias comunes, es decir, las bajas médicas por incapacidad temporal, preocupa cada vez más. Es una tendencia que afecta en España prácticamente a todos los sectores. El número de procesos iniciados por el sector de las mutuas en el sector de la distribución alimentaria -que recoge a la distribución, supermercados y autoservicios- se situó en 2024 en 353.880 procesos (15.493 procesos iniciados más que el año anterior).
Esta cifra supone una variación del 58,34% con respecto a 2020, año en el que estalló la pandemia de la covid-19 y punto de inflexión en esta cuestión para muchos sectores de actividad, tal y como recoge el informe sobre absentismo laboral por contingencias comunes en el sector de la distribución analizado por THE OBJECTIVE. Estos niveles de absentismo laboral por incapacidad temporal están en línea con los que ha experimentado el total nacional.
Durante el ejercicio 2024, el número de procesos iniciados de este tipo fue de 5.894.168 procesos, un 4,18% más que el año anterior. En los últimos seis años este porcentaje, en línea con lo que ha ocurrido en el sector del comercio al por menor, se ha disparado un 47,22%, tal y como muestra el informe con datos recogidos de Resina (Sistema de Información Sectorial de las Mutuas colaboradoras con la Seguridad Social).
«El aumento de las bajas por contingencias comunes, que es como se suele llamar a las enfermedades no estrictamente laborales, es una cosa que preocupa y sorprende», reconoce Ignacio García-Magarzo, director general de la patronal de supermercados Asedas, -que representa a supermercados como Mercadona o Día y a más de 300.000 trabajadores. Unas cifras que «después de la pandemia han crecido mucho en nuestro país en todos los sectores, también en el nuestro; es algo que nos preocupa mucho y como sociedad nos tenemos que preguntar qué está ocurriendo para que cada vez más trabajadores no puedan acudir a su puesto de trabajo por un problema de salud».
Un problema «multifactorial»
Este aumento claro de la las bajas, de su duración media y por ende del coste está provocando una fuerte tensión en un sector altamente competitivo. García-Magarzo subraya que se trata de un problema «multifactorial» que se ha disparado tras la pandemia. «Nos ha desbordado, estamos en un problema tan grave y con tantas aristas que o lo asumimos como sociedad o sinceramente, dentro de muy poco nos vamos a encontrar en una situación totalmente insostenible».
Un problema que es capital en empresas intensivas en mano de obra como es el sector de la distribución. «En casos como en los supermercados supone un problema añadido porque los compañeros tienen que suplir a la persona que está de baja», añade el representante de la patronal. «Las causas son muy complejas y muy numerosas, pero es un fenómeno que está creciendo mucho en España en los últimos años y nos está llevando tanto a las organizaciones empresariales como a la administración y los sindicatos a reflexionar juntos sobre el problema».
Un problema «muy complejo» que desde el sector intuyen que está muy relacionado con la saturación de los sistemas sanitarios, que «tardan mucho tiempo en hacer diagnósticos y en dar tratamientos para cuidar a las personas». Por ello, la patronal aboga por dotar a las mutuas de mayor capacidad y poder para gestionar estas bajas. Asedas insiste también en que es necesario «concienciación como sociedad y que la persona que coge una baja indebidamente se dé cuenta de que está penalizando a sus compañeros». «Los factores son muchos y todos tenemos que poner el foco en recuperar la salud cuanto antes, pero que aumenten tanto las bajas es un problema para la economía, para la productividad y para España en general», apunta García-Magarzo.
Mayor duración
En el sector de la distribución, la duración media de las bajas laborales derivadas de Contingencias Comunes diagnosticadas como patologías traumatológicas, que son tratadas por los Servicios Públicos de Salud de las Comunidades y Ciudades Autónomas, fue de 75 días, mientras que la duración de las mismas patologías derivadas de Contingencias Profesionales, que son tratadas por las Mutuas colaboradoras con la Seguridad Social, fue de 42 días.
Por lo tanto, en 2024, 77.000 trabajadores del sector diagnosticados con patologías traumatológicas derivadas de Contingencias Comunes tardaron 33 días más de lo necesario en recuperar su salud para poder reincorporarse al trabajo. «Esto supone un perjuicio para la salud de los trabajadores, para la competitividad de las empresas y para la sostenibilidad del sistema de la Seguridad Social, además de los quebrantos organizativos que conlleva para el funcionamiento normal de las empresas y la carga laboral que supone para el resto de trabajadores de las mismas».
