Disponible de nuevo en España el fármaco para dejar de fumar Champix tras su retirada en 2021
La Aemps ordenó la retirada de diversos lotes de este tratamiento al hallarse impurezas de nitrosaminas

Champix. | EP.
Desde el 24 de marzo vuelve a estar disponible en España Vareniclina (Champix®), el tratamiento de Pfizer para dejar de fumar, «tras demostrar resultados positivos desde la primera semana». Así lo ha anunciado la compañía este lunes, que asegura que su vuelta al mercado español «viene respaldada por datos que avalan su seguridad y eficacia a la hora de reducir el número de cigarrillos diarios a las 4 y a las 8 semanas de comenzar con el tratamiento. En 2021, la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps) ordenó la retirada de diversos lotes del fármaco Champix en lo que supuso su eliminación indefinida del mercado español al hallarse impurezas de nitrosaminas, en niveles superiores a lo permitido, tal como explicó la Aemps en una nota informativa.
Según explica Pfizer, Champix tiene un mecanismo de acción dual que se basa en ser un antagonista y agonista parcial altamente selectivo de los receptores nicotínicos de acetilcolina α4β2 en el cerebro. Estos receptores son responsables de la liberación de la dopamina asociada al consumo de nicotina, que genera los efectos de recompensa y refuerzo positivo. Al unirse a estos receptores, su principio activo actúa con un doble mecanismo: estimula de forma parcial la liberación de dopamina para mitigar los síntomas de abstinencia y, al mismo tiempo, bloquea la unión de la nicotina cuando se fuma, reduciendo la sensación de placer derivada del ello. Este enfoque reduce tanto la dependencia física como el refuerzo psicológico del tabaquismo.
El fármaco, agrega Pfizer, sigue un esquema de dosificación escalonada que optimiza su tolerancia y eficacia. Durante los primeros días, la dosis aumenta progresivamente, siendo la duración estándar del tratamiento de 12 semanas. Es la dependencia a la nicotina, una sustancia altamente adictiva, la que juega un papel central en la dificultad para dejar de fumar9. Muchas personas que intentan dejar de fumar enfrentan síntomas de abstinencia como ansiedad, irritabilidad y antojos intensos, lo que dificulta abandonarlo de forma definitiva.
Para José Chaves, director médico de Pfizer España, la clave de esta terapia es que «actúa como un antagonista y agonista parcial de los receptores nicotínicos, ayudando a reducir el deseo de fumar y bloqueando el placer asociado con la nicotina. De esta manera, esta opción terapéutica ayuda tanto a aliviar los síntomas de abstinencia como a disminuir el impacto placentero del cigarrillo», explica Chaves. «Dejar de fumar no es un proceso sencillo y puede ser todo un reto, por eso, contar con el asesoramiento profesional puede marcar la diferencia. De hecho, contar con la guía de un profesional sanitario multiplica por cuatro las probabilidades de conseguir dejar de fumar con éxito», añade.
El tabaco, un problema de salud pública en España
El consumo de tabaco es considerado uno de los principales desafíos de salud pública a nivel global, según la Organización Mundial de la Salud (OMS) y también en España, dado que afecta a millones de personas y genera importantes consecuencias tanto a nivel individual como colectivo. En la actualidad, en nuestro país el 36,8% de la población de 15 a 64 años ha consumido tabaco en el último año, el 33,9% lo ha hecho el último mes y el 25,8% indica que es un hábito diario. Entre los que fuman a diario, el 67,7% se han planteado dejar de fumar, y el 44,1% se lo ha planteado y lo ha intentado, según la Encuesta sobre Alcohol y otras Drogas en España (EDADES), realizada por el Ministerio de Sanidad en 2024.
Para el Dr. Juan Antonio Riesco Miranda, neumólogo responsable de la Unidad de Tabaquismo del Hospital Universitario de Cáceres y director de proyectos en Tabaquismo de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR), «abordar la adicción al tabaco no solo mejora la calidad de vida de los ciudadanos, sino que también supone un alivio significativo para el sistema sanitario, reduciendo los costes asociados al tratamiento de enfermedades relacionadas con el consumo de cigarrillos».
Fumar sigue siendo una de las principales causas de enfermedades prevenibles y muertes prematuras en España. A los 18 años, la prevalencia de consumo de tabaco en los últimos 30 días es del 40,9% en las mujeres y del 32,2% en los hombres. Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), más del 20% de la población adulta fuma a diario, lo que contribuye significativamente a la carga de enfermedades cardiovasculares, respiratorias y diferentes tipos de cáncer. Se estima que el tabaco es responsable de más de 50.000 muertes al año solo en nuestro país, lo que supone una muerte prematura cada 11 minutos.
En concreto, los últimos datos de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), señalaron que el número de diagnósticos de cáncer de pulmón en mujeres sigue en aumento en este 2025. Este crecimiento está ligado al aumento del tabaquismo femenino desde los años 70 y se prevé también un alza en otros tumores asociados, como los de cavidad oral y faringe.