El Banco de España recorta tres décimas su previsión de PIB en 2025 hasta el 2,4%
Escrivá se adelanta a Gavilán, encargado de avanzar los datos, en su última intervención ante los medios

El gobernador del Banco de España, José Luis Escrivá. | David Zorrakino (Europa Press)
El Banco de España ha recortado tres décimas su previsión de crecimiento para el Producto Interior Bruto (PIB) español en 2025, hasta el 2,4%, al tiempo que ha rebajado en una décima su estimación de 2026, al 1,8%, ante un contexto marcado por los aranceles y la incertidumbre sobre las políticas económicas futuras a nivel global. Así lo ha avanzado el gobernador del Banco de España, José Luis Escrivá, durante su intervención este lunes en el Congreso de los Diputados.
Aunque está previsto que el organismo presente y publique este martes el informe completo sobre las proyecciones macroeconómicas, Escrivá ha querido adelantar las previsiones para la economía española, que actualmente está marcada por una incertidumbre elevada y un entorno «extraordinariamente complejo».
De este modo, resta protagonismo a la última intervención del último director general de Economía, Ángel Gavilán, que tras el encontronazo con este casa por la elaboración del Informe Anual de 2025 -en el que no hubo especial profusión en la reforma de las pensiones, que Europa acaba de cuestionar en el balance de este semestre-, ha puesto tierra de por medio y, de hecho, tiene intención de abandonar el BdE el próximo 12 de junio.
El efecto arancelario
En opinión del nuevo gobernador de la institución supervisora, la exposición comercial directa de España a Estados Unidos es limitada y menor que la de otras grandes economías de la Unión Europea, aunque la exposición indirecta es mayor en algunos sectores, como el químico, debido a la integración de la economía en las cadenas globales de valor.
Por ello, desde el Banco de España se advierte de que bajo un escenario más adverso, con una escalada arancelaria prolongada, se reduciría la tasa de crecimiento de la economía española en 0,4 puntos porcentuales en 2025 y en 0,7 puntos porcentuales en 2026 con respecto a lo contemplado en el escenario base que maneja el Banco de España, mientras que la inflación se reduciría entre 3 y 5 décimas en dichos años.
El gobernador ha explicado que la economía española está experimentando una desaceleración del crecimiento desde tasas superiores al 3% a una tasa cercana al 2,5% en el primer semestre de 2025.
El sector exterior
El principal factor detrás de la desaceleración es la menor contribución del sector exterior. Además, según la encuesta del Banco de España, la incertidumbre es el principal factor que está afectando a las empresas. Un 30% de las empresas declara estar afectada por los aranceles y el 80% de las afectadas aseguran que la incertidumbre es un factor relevante. Cabe señalar que, en el último Informe Anual, la política internacional y sus efectos tuvo especial relevancia en dicho documento, en detrimento de otras políticas públicas domésticas, tal y como señalan fuentes del BdE a este medio.
Las nuevas previsiones del Banco de España apuntan a una tasa de inflación general promedio en 2025 del 2,4%, una décima menos de lo proyectado en marzo. Más allá de 2025, se espera que el proceso desinflacionario continúe en 2026, momento en que la tasa de inflación general promedio descendería hasta el 1,7%.
En cuanto al mercado laboral, el organismo ha mantenido en el 10,5% su previsión para la tasa de paro en 2025, aunque ha elevado dos décimas respecto al informe anterior su proyección para 2026, hasta el 10,2%. Por otra parte, en el plano fiscal, la institución ha mantenido en el 2,8% y en el 2,6% sus estimaciones para el déficit público en 2025 y en 2026, respectivamente. Sobre la deuda pública, el Banco de España ha elevado en una décima su previsión para 2025, hasta el 101,4% el PIB, porcentaje en el que se mantendría también en 2026.