El exdueño de un hotel, con fecha de desahucio por okupación, sigue vendiendo reservas
El antiguo propietario del establecimiento se ha negado a marcharse durante cuatro años explotándolo sin pagar nada

Fachada de un hotel.
Han tenido que pasar más de cuatro años para que Marisa empiece a ver que la pesadilla que lleva viviendo con un hotel de su propiedad se soluciona. La última sentencia del Juzgado de Primera Instancia Nº 5 de Jerez de la Frontera ha resuelto el lanzamiento de su propiedad, que ocupaba ilegalmente su anterior dueño desde que ella lo adquirió. Es decir, el antiguo propietario del inmueble tendrá que entregar a esta empresaria su propiedad el próximo día 22 de julio a las 11.30 de la mañana.
Sin embargo, según denuncia la afectada a este diario, las reservas en este establecimiento a través de internet y por los diferentes buscadores «siguen activas, incluso pasada la fecha del lanzamiento». Una sentencia contra la que cabe recurso, pero que deja claro que la posible interposición del mismo no tendrá efectos suspensivos respecto de la resolución recurrida, tal y como ha podido saber THE OBJECTIVE.
Esta situación «indignante», según la afectada, comenzó tras comprar hace unos años el Casino Jerezano, en Jerez de la Frontera, y transformarlo en el Hotel Casa Palacio María Luisa. La empresaria, de larga trayectoria, decidió ampliar el negocio, tal y como contamos hace unos meses en THE OBJECTIVE. Marisa se interesó por el hotel aledaño al suyo y le e informaron que Hacienda lo tenía embargado. La idea de la hostelera pasaba por ampliar su Hotel Casa Palacio con el establecimiento aledaño. Y así lo hizo, o al menos lo intentó. Al conocer su estado, se dirigió a la Hacienda de Málaga para comunicar su interés.
Manuel Pozo, jefe de tributos de Málaga, puso en marcha entonces una primera subasta. «En este momento yo no sabía ni el nombre del embargado», explica. A lo largo de varios años, E.F. -el dueño entonces de este establecimiento embargado-, «logró echar para atrás dos subastas con artimañas de todo tipo (dudosa moralidad)», asegura la afectada. Finalmente, Marisa consiguió hacerse con el establecimiento en una tercera subasta celebrada en noviembre de 2021.
Cuatro años explotándolo sin permiso
Le adjudicaron las 32 fincas que componen el hotel, sus jardines, un trozo pequeño y alargado pegado a mi hotel y finalmente, también un edificio de 2000 m² que linda con todo esto que llamamos ‘centro comercial’ porque así lo pone encima del edificio», explica en conversación con este diario. Todas estas fincas se le adjudicaron, según la empresaria, con unas cargas de hipoteca y de IBI que el antiguo dueño había dejado de pagar desde 2003. En ese momento, empezó el calvario. Tras materializarse la operación de compra de este hotel embargado por Hacienda en 2021, la afectada pagó y registró las propiedades. Fue entonces cuando el anterior propietario saca a relucir un contrato de alquiler «a todas luces inventado y simulado», según la propietaria.
En este contrato incluye las 32 fincas y un plazo de caducidad del contrato del año 2034 «con una cantidad de alquiler irrisoria», explica. Este contrato está firmado entre Sherry, Mirador -sociedad propietaria del inmueble anteriormente a la subasta pública- y Sfera hoteles -la sociedad explotadora del hotel previa a la subasta- con fecha anterior a la compra. Ambas sociedades pertenecen, según la afectada, a E.F. de las que es administrador único. Desde entonces, el antiguo propietario se niega a irse, hasta ahora.
Marisa recurre a sus abogados para encontrar una solución y lleva más de tres años donde se han realizado dos juicios con sentencias a su favor y esta tercera sentencia de la audiencia Provincial que espera que sea la definitiva. «El juez ha decretado el lanzamiento y la toma de la posesión con la policía para el día 22 de julio. Yo creo que la cosa ya está bastante clara», desea la propietaria. No obstante, sigue teniendo reticencias por los movimientos que pueda realizar ahora el expropietario y se muestra contrariada de que, a pesar de que la fecha de lanzamiento del proceso de desahucio es firme, siga siendo posible realizar reservas.
«La gente puede seguir reservando y cuando me dan la posesión del hotel igual está lleno de gente y no está muy claro qué tendré que hacer», lamenta. «Me parece inexplicable mantener las reservas abiertas cuando tienes una sentencia de lanzamiento de un juez», concluye.