The Objective
Economía

El IEE prevé un alza del PIB del 2,3% en 2025 y del 1,8% en 2026

Asegura que el desequilibrio fiscal es la otra “gran debilidad” de la economía española

El IEE prevé un alza del PIB del 2,3% en 2025 y del 1,8% en 2026

Presentación del informe sobre Coyuntura Económica del IEE. | IEE (Europa Press)

El Instituto de Estudios Económicos (IEE) prevé que el PIB crezca un 2,3% en 2025 y se modere al 1,8% en 2026, con la inversión como el «gran talón de aquiles» de la economía junto al desequilibrio fiscal. Según ha indicado el presidente del IEE, Íñigo Fernández de Mesa, y su director general, Gregorio Izquierdo, en la rueda de presa del informe, 2025 será un momento de «inflexión» para el crecimiento económico de España tras el dinamismo de los últimos años.

El IEE avisa de que el sector exterior, motor del impulso económico, perderá dinamismo y la inversión empresarial se mantendrá débil, mientras que el consumo privado se mantendrá como el pilar «fundamental» del crecimiento económico. «El consumo de los hogares se ha acelerado a lo largo del 2024 y el primer trimestre del 2025, gracias al aumento del empleo, de la renta disponible y la moderación de la inflación y de los tipos de interés y el consumo público», ha expuesto el presidente del IEE, según recoge Europa Press.

No obstante, el elevado grado de incertidumbre existente en España va a afectar negativamente al comportamiento del sector exterior, que puede incluso «drenar» el crecimiento del PIB, y de la inversión empresarial, dado que el entorno geopolítico, inclusive el nacional, no va a favorecer la puesta en marcha de nuevos proyectos empresariales.

Algunos de los principales riesgos de la economía provienen del contexto internacional, por la política arancelaria de Estados Unidos (EE.UU.) con Europa, que es el que más va a afectar a la economía española. En el ámbito interno, los riesgos pueden venir del desequilibrio fiscal, al tener una elevada deuda pública; un mayor gasto corriente, sobre todo, en pensiones, que alcanza ya el 12,4% del PIB, por encima de la media de la Eurozona, y un déficit estructural que supera el 3% del PIB.

Sobre la inversión, desde el IEE indican que la formación bruta de capital registra un avance muy limitado, situándose apenas un 4,8% por encima de los niveles de finales de 2019. «Sin una inversión en capital físico, infraestructuras, máquinas de tecnología y humano, la productividad no va a mejorar y los salarios difícilmente van a mejorar de forma significativa», expone Fernández de Mesa.

El mercado laboral moderará su crecimiento

Según las estimaciones del IEE, el mercado laboral seguirá creando empleo pero de manera más moderada respecto a los años previos, con una previsión de aumento del 1,9% en 2025 y del 1,5% en 2026, en línea con la senda de desaceleración de la actividad. Esto permitirá reducir la tasa de paro de una manera contenida, hasta el 10,3% en 2026 desde el 11,3% registrado en 2024 y del 10,7% en el presente año. Por su parte, la remuneración por asalariado crecerá por encima de la inflación.

Desde el IEE recalcan que el escenario que se plantea para el empleo se ha hecho desde la hipótesis de que no entre en vigor la reducción de la jornada laboral hasta las 37,5 horas planteada por el Gobierno. En el caso de que se aprobara, habría que ajustar a la baja, tanto el empleo, como le crecimiento del PIB estimado para 2025 y 2026.

La inflación irá descendiendo

Además, el IEE prevé que la inflación vaya desacelerándose tras la reciente crisis inflacionaria, pero que siga por encima del 2%. Así, registrará un crecimiento del 2,5% en media anual este año, mientras que la inflación subyacente apunta a una tasa media del 2,3% en el presente año.

No obstante, avisan de «presiones inflacionistas» que podrían venir de tres frentes, aunque con distinta intensidad. Por un lado, la política arancelaria que Estados Unidos aplique a Europa y cómo se va a transmitir a los precios de los productos importados e indirectamente sobre los precios de algunas materias primas.

Igualmente, y a nivel salarial, el Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC) ha evitado una espiral inflacionista, pero los problemas de vacantes en algunos sectores, la presión de la demanda y el aumento de otros costes laborales, vinculados a las subidas de las cotizaciones sociales, podrían inducir que la inflación se mantenga en unas tasas más elevadas. Por último, el canal más relevante de cara al verano es la evolución del precio del petróleo.

Déficit al 2,8% en 2025 y al 2,7% en 2026

Asimismo, desde el IEE proyectan un déficit público sobre el PIB al 2,8% para este año, que se reducirá al 2,7% en 2026, cifras menores que las de estos últimos años. No obstante, desde el centro de estudios económicos avisan que la retirada de los fondos Next Generation puede provocar que el déficit público «aflore», máxime sin unos nuevos Presupuestos Generales del Estado (PGE) que aborden la nueva realidad de la economía.

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