La CNMV aprueba la opa de BBVA sobre Sabadell y abre la decisión a los accionistas
El banco decide que el plazo de adhesión sea de 30 días y rebaja los ahorros de costes a 235 millones

Fachada del BBVA | Eduardo Parra (Europa Press)
El consejo de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) ha autorizado la oferta pública de adquisición de acciones (opa) de BBVA sobre Sabadell, según ha informado en un comunicado este viernes. El supervisor entiende ajustados los términos de la oferta a las normas vigentes y considera suficiente el contenido del folleto explicativo presentado por el grupo vasco. La CNMV recuerda que la contraprestación de la propuesta es de tipo «mixto» y consiste en una acción de nueva emisión de BBVA y 0,70 euros en efectivo por cada 5,5483 acciones del catalán.
Es decir, BBVA no ha mejorado las condiciones, que han sido ajustadas por los dividendos ofrecidos tanto por el mismo como por el Sabadell hasta la fecha. El mercado presiona desde hace tiempo para que aumente la contraprestación por el catalán para garantizarse el éxito.
Los accionistas del vallesano tendrán de plazo 30 y 70 días a convenir por el BBVA. El folleto establece que el grupo vasco ha decidido el plazo más corto, es decir, de un mes desde el día de la apertura. Si bien, podría ampliarlo en función de cómo evoluciones el proceso. Su objetivo es acelerar la operación después de los retrasos habidos. Hay que tener en cuenta que han pasado dieciséis meses desde que planteó la opa con carácter hostil.
La oferta está condicionada a la aceptación de un 50% de los derechos de voto del Sabadell. Por el momento, la intención de BBVA es no renunciar a la condición de adhesión mínima del 30% para que sea válida, aunque se guarda dicha posibilidad en el cajón por si le interesara.
BBVA ha actualizado los ahorros de costes que obtendría por la toma de control del Sabadell debido a la prohibición del Gobierno de fusionar ambas entidades en al menos tres años. De los 850 millones previstos inicialmente al tercer año de la ejecución ha pasado a los 235 millones, que se materializarían en el cuarto y quinto ejercicio. Con posterioridad se iría beneficiando hasta alcanzar la cuantía inicial. Esta era una de las grandes incógnitas que había sobre la opa y que ha sido ya desvelada. No obstante, el banco vasco espera que la decisión del Consejo de Ministros sea anulada por la Justicia con anterioridad.
La entidad que preside Carlos Torres calcula que podría obtener mejoras de eficiencia y productividad derivadas de acuerdos con terceros, cuestiones administrativas y tecnología, sin asumir grandes costes por restructuración y sin incumplir la gestión autónoma del Sabadell impuesta por el Gobierno. De igual manera, espera lograr unas sinergias de 75 millones en gastos de financiación de la entidad catalana. Eso sí, siempre y cuando se materialice la venta de la filial británica del catalán al Santander.
Además, BBVA ha elevado su capacidad para lograr sinergias una vez pueda llevar a cabo la fusión, a partir de 2028, hasta los 900 millones. Será entonces cuando, por ejemplo, llevaría a cabo un cierre de oficinas de unas 300, es decir, menos del 10% del conglomerado combinado.
Debido a las limitaciones del Consejo de Ministros, el banco con sede en Bilbao ha modificado también su capacidad de financiación a la economía (familias y empresas) con la opa. Si antes preveía unos 5.000 millones adiciones, ahora estima que estos no superarán los 1.500 millones.