Lease back como herramienta de flexibilidad y crecimiento empresarial, según Econocom
Se basa en financiar activos que las compañías ya usan, basándose en su valor de mercado y no en su valor neto contable

Finanzas | Jason Briscoe (Unsplash)
La financiación alternativa gana peso en España como una palanca estratégica para empresas que necesitan liquidez sin aumentar su endeudamiento bancario. La fórmula más innovadora es sale & lease back, una modalidad en la que Econocom es referente europeo y que se basa en financiar activos que las compañías ya están utilizando, basándose en su valor de mercado y no en su valor neto contable.
Esta diferencia, que puede parecer técnica, tiene un impacto inmediato en la capacidad de generar liquidez y en la salud financiera de las compañías, y complementa al modelo tradicional de crédito bancario. En los balances empresariales, los activos tecnológicos o industriales suelen figurar depreciados, con un valor residual cercano a cero tras años de amortización. Sin embargo, el valor de mercado de esos mismos activos puede ser aún muy alto, y desde luego superior al que figura en libros.
Econocom propone reconocer ese valor y transformarlo en liquidez inmediata mediante operaciones de renting comprando a la empresa determinados activos libres de cargas y con un valor de venal determinado por un tasador independiente. A la vez, el cliente monetiza sus propios activos a precio de mercado y los sigue utilizando bajo un contrato flexible de arrendamiento.
El resultado es claro: liquidez para proyectos de crecimiento, innovación o internacionalización, sin perder la operativa diaria de los equipos. Econocom es pionero en traer a Europa y España, un modelo que es estándar en Estados Unidos y Reino Unido para sectores como el industrial, hotelero, retail o la logística, que financian su expansión con el lease back de inmuebles o equipamiento.
En Francia, hay ejemplos de compañías industriales que han reforzado su liquidez a través de operaciones de lease back en sus plantas productivas, sin tocar sus líneas de crédito bancario. En España, donde más del 60% de las pymes reconocía en 2024 dificultades de acceso a crédito en fases de expansión, esta fórmula supone una ventana de financiación poco explorada. Según Funcas, el mercado de leaseback alcanzó en España los 4.200 millones de euros en 2023, frente a los 57.000 de Europa.
Liquidez para no «morir de éxito»
Uno de los mayores riesgos para las empresas en crecimiento es “morir de éxito”: tener demanda y pedidos, pero carecer de liquidez suficiente para atenderlos. Se calcula que en nuestro país casi un 30% de las empresas que entran en concurso de acreedores lo hace no por falta de clientes, sino por tensiones de tesorería.
Econocom ayuda a sus clientes a identificar fuentes de financiación escondidas en su propio balance, activos que no generan liquidez hasta que se ponen en valor de forma adecuada, sin frenar producción ni cancelar pedidos, y con mayor flexibilidad que la banca tradicional.
También renting tecnológico
Junto al lease back, Econocom ofrece renting tecnológico y modelos de Device as a Service (DaaS). Este esquema convierte la adquisición de equipos en un coste operativo recurrente, que incluye mantenimiento, renovación periódica y gestión del fin de vida. Para los clientes, significa previsibilidad financiera, acceso constante a tecnología actualizada y reducción de riesgos ligados a la obsolescencia.
El renting responde a la necesidad de transformar inversiones de capital (CAPEX) en gastos operativos (OPEX), manteniendo los máximos estándares de reporting. Tanto el renting como el lease back son herramientas de flexibilización que Econocom ofrece a las empresas desde hace 50 años.
Un cambio cultural necesario
En España, estos modelos de contrato todavía no se perciben como una herramienta habitual de financiación, ni por parte de empresas ni de bancos. Si bien, cada vez vemos mayor interés por distintas modalidades de contratos de financiación de activos en uso. Aun así, estamos lejos de mercados más maduros. Econocom apuesta por trasladar ese modelo a Europa continental, ofreciendo a las compañías una alternativa real para liberar liquidez, reforzar su resiliencia financiera y seguir creciendo.