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Economía

España, líder en seguros de salud de empresa: el 51% de las pólizas son colectivas

El 14% están gestionadas por la administración pública, mientras que el 37% provienen del sector privado

España, líder en seguros de salud de empresa: el 51% de las pólizas son colectivas

Clínica Adeslas. | Europa Press

El modelo español de sanidad privada tiene una gran dependencia de empresas y colectivos. Más de la mitad (51%) de los seguros de salud privados en España provienen de empresas, muestra de su fuerte dependencia del ámbito corporativo. Así se desprende del informe ‘Estudio comparativo del seguro de salud en España con países de su entorno’, presentado esta semana en el marco de la Cátedra de Salud Sostenible y Responsable de la Universidad Complutense de Madrid, y analizado por THE OBJECTIVE.

«La contratación de los seguros de salud por parte de colectivos como son las grandes empresas supone un impulso determinante para el mercado de los seguros de salud», señala el estudio, que indica que especialmente las compañías multinacionales ofrecen seguros colectivos como parte de los beneficios laborales para atraer y retener talento, cubriendo a empleados y, en algunos casos, a sus beneficiarios.

En este caso, más del 51% de las pólizas de seguros privados en España son adquiridas a través de seguros colectivos proporcionados por empleadores, tanto del sector público como del privado. Aproximadamente un 14% de estas pólizas están gestionadas por la administración pública, mientras que el 37% provienen del sector privado. En comparación con varios países de Europa como modelos de sanidad similares, en Italia, la contratación de los seguros de salud es relativamente común en grandes empresas, las cuales suelen ofrecer seguros colectivos, especialmente en sectores como banca y manufactura. Sin embargo, al contrario que España, el sector público no utiliza seguros colectivos; ya que los empleados públicos están completamente integrados en el SSN.

En Portugal también es relativamente común, especialmente en áreas urbanas y en sectores como el tecnológico y el de servicios, que las empresas ofrezcan seguros colectivos como beneficio laboral. En Reino Unido, el seguro privado no está muy extendido como opción colectiva ofrecida por empleadores, debido a la fuerte cobertura universal del NHS. Empresas multinacionales y de sectores específicos (como finanzas) pueden ofrecer seguros privados como beneficio adicional, aunque no es una práctica extendida.

En Suecia es poco frecuente. Los seguros colectivos no son habituales debido a la fuerte cobertura universal y los bajos costes directos del sistema público. Algunas empresas privadas pueden ofrecer seguros suplementarios como beneficio, pero se dirigen principalmente a servicios que no son prioridad en el sistema público, como fisioterapia o consultas rápidas. Y en Suiza es poco común debido a la obligatoriedad de contratar un seguro básico de salud, lo que reduce la necesidad de seguros colectivos. No obstante, algunas empresas ofrecen seguros suplementarios colectivos, que incluyen beneficios adicionales como habitaciones privadas en hospitales o acceso a especialistas sin listas de espera.

España es el único país en el cual las empresas que contratan seguros de salud para sus empleados obtienen incentivos fiscales, ya que las primas son gasto deducible en el Impuesto sobre Sociedades y los primeros 500 euros por empleado anuales están exentos de IRPF para el trabajador (incluyendo cónyuge e hijos), reduciendo su carga fiscal. Si el coste del seguro es mayor, el exceso tributa como retribución en especie. Italia tiene incentivos fiscales para los empleadores pero no para los empleados.

Empleados públicos

Por otro lado, España se diferencia significativamente del resto de los países objeto de estudio al ofrecer un sistema consolidado de mutualidades administrativas; en el resto de los países, el seguro privado para empleados públicos tiene un papel marginal o inexistente. El mutualismo administrativo en España es un mecanismo de cobertura del Régimen Especial de la Seguridad Social, formado por tres grandes mutualidades: Muface, Mugeju e Isfas. Las mutualidades conciertan la provisión de la asistencia sanitaria con entidades de seguro privadas y con el Instituto Nacional de Seguridad Social (INSS), abonando a las entidades concertadas una cuota capitativa mediante una prima mensual por persona protegida.

De esta forma, bajo el modelo de mutualismo administrativo, los funcionarios pueden elegir libremente si quieren ser atendidos por el Sistema Nacional de Salud o por una entidad aseguradora con el mismo nivel de prestaciones. «Este modelo, aunque efectivo en garantizar acceso rápido y personalizado, enfrenta desafíos financieros que podrían requerir reformas estructurales», concluye el informe. Muface gestiona un presupuesto para asistencia sanitaria de más de 4.400 millones de euros para el periodo 2025-2027, con un aumento de financiación que busca asegurar el concierto con las aseguradoras privadas y el sistema sanitario público. Se trata de una cifra considerable que se destina a cubrir la atención médica de alrededor de 1,5 millones de personas entre mutualistas y sus familiares. 

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