La otra factura de Muface: gastó diez millones de euros en contratos públicos en 2024
Estas partidas son destinadas al mantenimiento de instalaciones, formación de personas y actualización tecnológica

Fachada de un edificio de Muface. | EP
La Mutualidad de los Funcionarios Civiles del Estado (Muface) da servicio a alrededor de 1.5 millones de personas, incluyendo funcionarios públicos en activo o jubilados, y sus familiares. Para ello aprobó este 2025 un nuevo concierto sanitario que se nutre de 4.808 millones de euros de las arcas públicas para los años 2025-2027. Se trata de la mayor partida presupuestaria de la historia de la entidad, con un incremento de 1.276,5 millones de euros respecto al concierto anterior para afrontar el creciente gasto sanitario. El nuevo Concierto de Asistencia Sanitaria Nacional se firmó entre Muface y las aseguradoras Adeslas y Asisa para los años 2025, 2026 y 2027.
Además de esos casi 5.000 millones de euros que maneja el convenio de Muface, existe otro flujo de dinero menos visible pero igualmente relevante: unos diez millones al año destinados a contratos públicos. Estas partidas, que no forman parte de las prestaciones habituales, evidencian un trasfondo económico del que pocas veces se habla, más allá de su función sanitaria. Su destino: la gestión interna de la mutualidad, el mantenimiento de instalaciones, la formación del personal y la actualización tecnológica, entre otros gastos administrativos.
Licitaciones y contratos menores
En 2024, la mutualidad de los funcionarios, perteneciente al Ministerio para la Transformación Digital y de la Función Pública, gastó casi diez millones de euros en licitaciones y contratos menores. En concreto, Muface desembolsó 9.474.012 euros en 91 contratos públicos, según se desprende de la Plataforma de Contratación y así lo recoge el propio Muface en su web, consultada por THE OBJECTIVE.
Con respecto a las licitaciones, en 2024, Muface desembolsó 9.108.709 euros en 53 adjudicaciones. Entre ellos, por ejemplo, destaca una licitación para el desarrollo de servicios de la oficina de arquitectura y seguridad de Muface, por 834.170 euros; el desarrollo de nuevas funcionalidades del sistema SIREM, por 911.759 euros; y las obras de reforma que tuvieron que llevarse a cabo en el local perteneciente a Muface de Ceuta, por 233.433 euros.
En cuanto a los contratos menores, el año pasado la mutualidad de los funcionarios licitó 37, con un coste total de 365.303 euros. La mayoría responden a cursos de formación y a adquisiciones de material para los empleados. En conjunto, sumando licitaciones y contratos menores, como hemos indicado anteriormente, Muface destinó unos diez millones anuales en 2024 en contratos públicos para el mantenimiento de sus instalaciones, la formación de sus empleados, actualización tecnológica o la renovación de su inmobiliario, entre otras partidas. Este gasto, aunque discreto frente al presupuesto sanitario, constituye una parte esencial de la gestión administrativa de la mutualidad y pasa prácticamente inadvertido.
El sueldo de la directora de Muface
Myriam Pallarés es la directora general de Muface desde enero de 2020. Su llegada al cargo se dio en un contexto complejo, marcado por la pandemia y la necesidad de modernizar los servicios de la mutualidad. En su primer año de mandato, Pallarés percibió un salario de 88.879 euros. Sin embargo, los años siguientes trajeron incrementos sucesivos en su remuneración.
En 2021 y 2022 habría percibido un salario de 98.108 euros y 99.866 euros (incluidos seis trienios por su condición de funcionaria), respectivamente. En el año 2023, su salario ascendió a 104.325 euros brutos, incluidos siete trienios por ser funcionaria, sueldo que mantuvo en 2024, según la información actualizada en noviembre del año pasado. Este incremento constante representa un aumento acumulado del 17% en apenas cuatro años, en un periodo marcado por tensiones en el sector del mutualismo y debates sobre la sostenibilidad de los recursos destinados a la asistencia sanitaria de los funcionarios.
Los ajustes en el salario de Pallarés se enmarcan dentro de las normas de retribución de los altos cargos de la Administración pública, que combinan el sueldo base del puesto con los trienios por antigüedad y otros complementos. No obstante, su evolución ha llamado la atención en un momento en que muchos mutualistas y empleados públicos han vivido recortes o ajustes en otros aspectos de la gestión sanitaria. Mientras la directora mantiene un salario en aumento, Muface continúa enfrentándose a retos relacionados con la cobertura sanitaria, la eficiencia en la gestión de contratos y la adaptación a las necesidades cambiantes de sus afiliados.
Por ello, antes de que finalice 2025 el Ministerio de Sanidad solicitará una reunión con el Ministerio de la Función Pública para iniciar conversaciones que les permitan «avanzar» en que el sistema actual de mutualismo «se adecúe o incorpore algunas de las recomendaciones que hizo» la Autoridad Independiente para la Responsabilidad Fiscal (Airef). «El sistema Muface, sin cambios muy sustantivos, no se sustenta», ha dicho el secretario de Estado de Sanidad, Javier Padilla, en el XIV Encuentro Global Altos Cargos de la Administración Sanitaria.