The Objective
Economía

Barcelona suma menos viviendas de alquiler en un año que en un trimestre antes del control

Se incorporaron 1.202 nuevas viviendas frente a las 1.946 que se sumaron en el trimestre anterior a la declaración

Barcelona suma menos viviendas de alquiler en un año que en un trimestre antes del control

Viviendas en construcción.

El precio de la vivienda en alquiler sigue imparable en muchas ciudades de España. Una realidad que el control de precios aplicado por algunas comunidades a través de la declaración de zonas tensionadas que contempla la Ley de Vivienda no ha podido frenar. Los datos oficiales del Incasòl —organismo encargado de gestionar la fianza de los alquileres y de promover la vivienda pública en Cataluña— analizados por THE OBJECTIVE, muestran una caída interanual del 19,7% en el número de contratos de alquiler de larga estancia en esta comunidad durante el primer trimestre de 2025. También apuntan hacia una reducción del 58% en el saldo de nuevas viviendas incorporadas al mercado del alquiler respecto al mismo trimestre de 2024.

En las zonas declaradas tensionadas, en las que se aplica el control de precios, la contracción del saldo alcanza el 67%. La situación es especialmente significativa en Barcelona, donde en el primer trimestre de 2025 solo se añadieron 423 nuevas viviendas en alquiler frente a las 1.895 del mismo periodo del año 2024, lo que supone una caída del 77,7%. Los datos también reflejan que en los cuatro trimestres en los que ha estado vigente la declaración de área tensionada, se han incorporado 1.202 nuevas viviendas al mercado, un 38,2% menos que las 1.946 que se sumaron únicamente en el trimestre anterior a la declaración.

Peores viviendas

Es decir, en un año completo de aplicación del control de precios se han incorporado menos viviendas que en un solo trimestre previo, lo que evidencia una clara contracción de la oferta en la ciudad en un contexto de alta demanda y necesidad de vivienda. Los datos de Incasòl muestran también una ligera reducción de los precios, una rebaja sobre la que hizo hincapié posteriormente el Gobierno de Pedro Sánchez. Según estos datos, la renta media en Cataluña se situó en 828 euros mensuales, un 4,7% menos que el año anterior. En Barcelona ciudad, el descenso fue del 8,9%, hasta los 1.087 euros.

Sin embargo, el análisis detallado de los datos (por quintiles o subgrupos de distinta tipología de vivienda) evidencia que la bajada se explica por la reducción de la superficie media contratada (-5,3%) y por la pérdida de calidad de las viviendas. En otras palabras, «los precios bajan porque las viviendas que se están alquilando son más pequeñas y de menor calidad, no porque el alquiler sea más asequible», según fuentes del sector consultadas por este diario.

«Se produce no solo una reducción de la oferta, sino también una reducción de la calidad de la oferta. Lo que se está poniendo en alquiler ahora en Cataluña son inmuebles más pequeños y de peor calidad», apunta Helena Beunza, presidenta de la Asociación de propietarios de Viviendas en Alquiler (Asval) en conversación con THE OBJECTIVE. Por ello, parte de «la supuesta reducción de los precios», añade, se debe a que son inmuebles más pequeños y no están en las condiciones adecuadas. «Es importante explicar las cifras bien y de manera transparente. Es un tema lo suficientemente serio como para que no juguemos con las cifras».

Se hunde la inversión en Cataluña

Mientras, desde el sector tienen claro que la regulación ha frenado totalmente la inversión en vivienda en alquiler en Cataluña. «Cuando nos sentamos con inversores institucionales, todos nos dicen lo mismo, queremos invertir en hoteles, en living (residencias de estudiantes, alquiler flexible…) y en sector logístico, pero cuando es en living en España, insisten en que sea solo donde no hay regulación del alquiler», apunta Antonio de la Fuente, Managing Director de Living en Colliers, a THE OBJECTIVE.

«No quieren nada relacionado con la vivienda en alquiler en Cataluña. No van a invertir ni un euro en viviendas en alquiler en lugares donde haya control de precios. Esa es la realidad», añade. «Estoy muy en contra de lo que ha ocurrido en Cataluña con el control de alquileres. Lo que encontramos es que la oferta de alquiler se ha reducido», señalaba por su parte esta semana Jaime Luque, miembro del Consejo Asesor de Vivienda de la Comisión Europea, en el Rental Housing Forum.

Al margen de la regulación en materia del alquiler, hace unos días Salvador Illa anunció que su Ejecutivo estudia prohibir la adquisición de inmuebles con fines lucrativos. Además, el presidente catalán no descarta restringir el número de propiedades que puede poseer una persona. La iniciativa, respaldada por ERC, los Comuns y la CUP, convertiría a Cataluña en la primera comunidad autónoma en aplicar restricciones directas a la compraventa de vivienda privada. Una medida que de aprobarse, según el sector, ahuyentará aún más a la inversión. «Cataluña corre el riesgo de convertirse en un laboratorio de políticas intervencionistas que terminan expulsando la inversión privada», según Iñaki Unsain, Personal Shopper Inmobiliario en Barcelona.

Publicidad