María Blasco, exdirectora del CNIO, busca financiación para su empresa de terapia génica
Tras cerrar 2024 con pérdidas de 864.000 euros, prepara una ronda de financiación y busca socios farmacéuticos

María Blasco, socia fundadora de Telomere Therapeutics. | EP
La biotecnológica catalana Telomere Therapeutics, especializada en el desarrollo de terapias génicas basadas en la telomerasa y fundada en 2020 por la exdirectora del CNIO, María Blasco, afronta 2025 inmersa en una nueva fase de crecimiento. Tras cerrar el ejercicio 2024 con pérdidas de 864.000 euros y unos resultados negativos acumulados de un millón de euros, la compañía prepara una ronda de financiación y abre conversaciones con grandes farmacéuticas internacionales con el objetivo de consolidar su proyecto científico y garantizar su sostenibilidad a medio plazo, según se desprende de su informe financiero correspondiente al ejercicio 2024, analizado por THE OBJECTIVE.
«Se han iniciado conversaciones con las principales empresas farmacéuticas y con potenciales inversores para afrontar con garantías de éxito el desarrollo futuro del proyecto. En este contexto, la Sociedad ha avanzado de manera satisfactoria en la preparación de la nueva ronda de financiación que permitirá afrontar el plan estratégico y financiero definido para los próximos años con la financiación adecuada para alcanzar los objetivos establecidos» se desprende del documento.
Con sede en el Paseo de Gracia de Barcelona, Telomere Therapeutics fue fundada hace cinco años y desde entonces centra sus esfuerzos en la investigación y desarrollo de terapias génicas in vivo que utilizan vectores adenoasociados para la expresión del gen de la telomerasa. Su trabajo se enfoca en síndromes teloméricos, con especial atención a la fibrosis pulmonar idiopática, una enfermedad rara de alta mortalidad para la que aún no existen tratamientos curativos.
En fase de desarrollo y sin ingresos comerciales
El informe de cuentas correspondiente a 2024 refleja que la empresa continúa en fase de desarrollo preclínico, sin ingresos procedentes de ventas, pero con una estructura sólida de activos y financiación. El balance total asciende a 4,98 millones de euros, frente a los 4,47 millones del año anterior, mientras que los fondos propios se sitúan en 1,62 millones, tras absorber las pérdidas del ejercicio.
El patrimonio neto se ha visto reducido respecto a 2023 (2,97 millones) por el incremento del gasto en investigación, aunque la dirección considera que esta situación es «normal y prevista» para una empresa en fase de innovación científica. Los activos intangibles, principalmente relacionados con I+D, suman 2,31 millones de euros, lo que refleja la fuerte inversión en proyectos de desarrollo de nuevas terapias.
La compañía mantiene un equipo reducido —con una media de 2,5 empleados durante el ejercicio— dedicado casi en exclusiva a tareas científicas y técnicas. A pesar de las pérdidas, los administradores sostienen que las perspectivas financieras son estables gracias a la combinación de fondos propios, subvenciones públicas y financiación no dilutiva.
Fuerte apoyo público
Durante 2024, último año de María Blasco al frente del CNIO, Telomere Therapeutics consolidó su posición como beneficiaria de programas públicos de impulso a la investigación biotecnológica. Recibió financiación a través de varios proyectos del Ministerio de Ciencia e Innovación, entre ellos, el RETOS CPP2023-010531, dotado con 1,77 millones de euros, y el RETOS CPP2021-008483, con 631.000 euros adicionales. Además, el programa NEOTEC SNEO-20232087 del CDTI aportó otros 195.000 euros en subvenciones directas.
En conjunto, la compañía gestionó más de dos millones de euros en ayudas públicas en 2024, y desde 2022, como publicó THE OBJECTIVE, habría recibido más de tres millones de euros en ayudas por parte del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades. El informe financiero también recoge 458.922 euros en subvenciones de capital pendientes de imputar, que se aplicarán a medida que avance la amortización de los activos financiados. La empresa mantiene además 211.000 euros en depósitos de garantía, vinculados a la obtención de préstamos públicos para I+D.
Plan de futuro
De cara a 2025, Telomere Therapeutics se encuentra negociando una nueva ronda de inversión privada que le permita alcanzar el siguiente hito de valor definido por sus socios. Según el informe, la dirección ha iniciado contactos con las principales farmacéuticas internacionales y con fondos de inversión especializados en biotecnología, con el propósito de establecer alianzas estratégicas que aceleren el desarrollo clínico de su terapia.
Los administradores sostienen que la compañía dispone de la financiación suficiente para mantener su actividad sin generar ingresos a corto plazo, pero reconocen la necesidad de ampliar recursos para afrontar la fase de ensayos clínicos y producción a escala. «La Sociedad no genera flujos de efectivo ni prevé generarlos en el corto plazo, debido a la etapa en la que se encuentran sus proyectos. Tras el cierre de la ronda de financiación en el ejercicio 2021 y la solicitud de los recursos financieros no dilutivos complementarios, ha conseguido la financiación del proyecto necesaria para completar su realización hasta alcanzar el hito de valor definido por los Socios. Dicha financiación permite, a pesar de ser una Sociedad que no genera ingresos vía ventas y que genera pérdidas recurrentemente, garantizar la viabilidad de la Sociedad según las proyecciones preparadas por la dirección», señala la memoria de gestión.
El capital social de Telomere Therapeutics se reparte entre Invivo Ventures FCR (50,9%), el fondo público Invierte Economía Sostenible (18,1%), y las científicas Fátima Bosch Tubert (10,5%) y María Blasco Marhuenda (10%). El CNIO tiene el 6,45% de la biotecnológica.
