El SEPE registra ya 740.000 fijos discontinuos que no aparecen en las listas oficiales de paro
El incremento del desempleo juvenil en nuestro país supone el 45% del total del incremento del paro nacional

Yolanda Díaz, ministra de Trabajo. | EP
A las puertas de que la reforma laboral cumpla en el próximo mes de enero su cuarto aniversario, el mercado del empleo en España no ha logrado despojarse del peor dato de paro de toda la UE, ni tampoco de los peores datos de desempleo juvenil ni femenino en comparación con los socios europeos.
La estacionalidad y la rotación, incluso en la contratación indefinida, siguen siendo dos de las grandes deficiencias del mercado laboral. Uno de cada cuatro desempleados de la zona euro es español. Datos del SEPE también registraron en el mes de septiembre 740.000 fijos discontinuos inactivos, que no aparecen en las listas oficiales del paro.
Además, 847.150 personas necesitan dos o más empleos para poder llegar a fin de mes. Es lo que se conoce por pluriactividad. Mientras, el absentismo supera ya el millón de personas que no van a su trabajo diariamente a lo largo de año. Hay datos más sangrantes: España es el segundo país de la UE con mayor tasa de pobreza infantil y tiene hasta cuatro millones de personas en situación de carencia material severa.
Con 600.000 nuevos contratos indefinidos que no consiguen bajar el paro y solo el 17,2% de estos contratos a tiempo completo, el Gobierno ha celebrado este martes los datos de empleo y de afiliación a la Seguridad Social. Como en otras ocasiones, ha presumido de empleos de calidad, debido a un cambio estructural en el mercado de trabajo. Pero la información que maneja el Gabinete de Estudios de la Unión Sindical Obrera (USO) no comparte esta visión optimista. De ahí que esta organización sindical destaque el número de parados registrados que da el SEPE (2.443.766); también el de los trabajadores con disposición limitada (362.4089) y otros ocupados (191.075), a los que suma el de las personas inmersas en Ertes —que en el mes de octubre alcanzaron las 13.126— y el de los fijos discontinuos inactivos, que se situaron al finalizar septiembre en más de 740.000.
El dato real de parados
El total de personas registradas en el SEPE y que no están ocupadas estaría por encima de los 3,7 millones de parados reales -explica a THE OBJECTIVE José Luis Fernández Santillana, responsable del Gabinete de Estudios de USO-. Lo que en términos porcentuales elevaría el dato español a un 14% aproximadamente de la actual tasa de paro de 10,5%, frente al 5,90% de Europa. Cifras que también ha valorado para este diario Juan Bravo Baena, vicesecretario de Hacienda del Partido Popular, subrayando que «España no solo no funciona, sino que hay 3,2 millones de desempleados, 2,2 millones de personas vinculadas al Ingreso Mínimo Vital, además de alrededor de un millón de personas que faltan diariamente a su trabajo».
La cuestión, indica Fernández Santillana, es que, pese a los calificativos del Gobierno y del Ministerio de Trabajo que dirige Yolanda Díaz, «tenemos un mercado laboral muy afectado por la estacionalidad y, por tanto, por la temporalidad de la relación contractual que, aunque se denomine indefinida, siguen siendo contratos de temporada».
Con los datos oficiales en la mano, añade, no cabe más que preguntarse «qué tipo de ocupación tienen las 1.231.401 personas inscritas como demandantes de empleo ocupadas que están registradas en el SEPE, demandando empleo en octubre, y que son 38.993 más que en septiembre».
El desempleo de los jóvenes
En el mes de octubre, y por sectores económicos con respecto a septiembre, el paro registrado desciende en el sector de construcción en 2.121 (-1,21%); aumenta en industria 1.148 (0,61%), agricultura 1.270 (1,68%) y servicios 18.496 (1,05%), pero el colectivo sin empleo anterior aumenta en 3.308 (1,45%). Lo que nos hace sospechar -señala Fernández Santillana- «si ese incremento de población activa puede ser absorbido por la actividad económica».
Según los últimos registros, el desempleo masculino se sitúa en 963.301, al ascender en 10.540 personas (1,11%), y el femenino, en 1.480.465, aumentando en 11.561 (0,79%) en relación con el mes de septiembre. En términos interanuales, el paro masculino baja en 71.142 (-6,88%) y el femenino cae en 87.146 (-5,56%).
El desempleo de los jóvenes menores de 25 años ha ascendido en el mes de octubre en 10.082 personas (5,49%) respecto al mes anterior. Y esto supone el 45% del total del incremento del paro. El porcentaje de parados de más de 25 años sube en 12.019 (0,54%).
CEOE alerta de la caída de la productividad
Entre los agentes sociales, CEOE ha sido la primera organización empresarial en reaccionar, destacando «un crecimiento del empleo coherente con el incremento de la población activa, que se encuentra en cifras récord, superando los 25 millones frente a los 23 de finales de 2020».
A pesar de los buenos datos de afiliación, a la organización que preside Antonio Garamendi le preocupa la caída de la productividad por ocupado, un 3,6% inferior a la registrada a finales de 2019, según confirmaron los datos de la EPA del tercer trimestre, así como la caída también de la productividad por hora trabajada, que presentó resultados muy débiles, aunque con una leve mejoría (+ 0,9% interanual).
CEOE remarca la evolución a la baja de la jornada media efectiva en el sector privado, hasta las 30,9 horas efectivas por semana en los tres primeros trimestres de 2025 (datos EPA). Recuerda que «esta caída se debe al incremento incesante de la incapacidad temporal por contingencias comunes, así como a la deficiente regulación de los permisos, que lejos de cumplir el objetivo de proteger al trabajador, proliferan, generando una clara inseguridad jurídica».
Un crecimiento desigual y un paro estructural
Los autónomos comprueban cómo el comportamiento del empleo ha sido bueno, pero -apunta ATA, la mayor Asociación de Trabajadores Autónomos de España, que preside Lorenzo Amor-, «seguimos diciendo que son precisamente las grandes y medianas empresas las que están liderando la creación de empleo, mientras que los autónomos y empresas de uno a tres trabajadores siguen destruyendo empleo». La patronal de la pequeña y la mediana empresa dirigida por Ángela de Miguel, Cepyme, mantiene que, «aunque el empleo sigue con una evolución positiva, esta es desigual y se aprecia un peor comportamiento relativo en ámbitos con preeminencia de pequeñas y medianas empresas».
Una observación que no pasa por alto la patronal madrileña de empresarios, Ceim. «Queda claro que se mantiene un paro estructural de casi 2,5 millones de personas, a las que hay que sumar los ocupados demandantes de empleo (1,2 millones), que no encuentran oportunidades a tiempo completo para desarrollar su actividad laboral».
