Solo el 5% de los trabajadores menores de 30 años pertenece a un sindicato
En los países de la OCDE alrededor del 30% de los empleados está sindicado y en España ese porcentaje cae al 14%

El secretario general de la UGT, Pepe Álvarez (i) y el secretario general de CCOO, Unai Sordo. | Fernando Sánchez (Europa Press)
Los sindicatos se quedan sin relevo generacional. Apenas el 5,5% de los trabajadores de entre 16 y 30 años está afiliado a uno en España. Según los últimos datos disponibles, la tendencia se constata en las dos grandes organizaciones sindicales. En Comisiones Obreras (CCOO) los afiliados menores de 30 años rondan los 100.000, mientras que en la Unión General de Trabajadores (UGT), que cuenta con casi un millón de miembros —983.521 en total—, tan solo el 9,4% pertenece a esta franja de edad.
A nivel internacional, el contraste es notable. En los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), alrededor del 30% de los trabajadores está sindicado. En España, ese porcentaje cae al 14%, muy lejos del 49% de Bélgica o del 66% de Suecia. Y la estimación de 2023 sobre la afiliación de los menores de 30 años situaba en torno al 3% a quienes pagan una cuota sindical, una cifra aún más baja que los datos actuales.
Pese a ello, y según las encuestas sobre tendencias sociales del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), la percepción de los jóvenes hacia los sindicatos es paradójica: los grupos de edad que mejor los valoran son precisamente los de 18 a 24 años y de 25 a 34 años. Todo ello, en un contexto de pérdida de confianza que se acentuó tras la crisis de 2008, cuando la caída de afiliación, ya perceptible en toda Europa, se profundizó.
Tras aquel golpe, los sindicatos comenzaron a esforzarse por llegar a colectivos tradicionalmente ajenos a su perfil típico —trabajadores de mediana edad, con empleo estable y cualificación media en sectores industriales—. Los nuevos nichos se concentran ahora en empleos ocupados mayoritariamente por jóvenes, mujeres e inmigrantes, grupos que representan lo que las centrales sindicales definen como «nuevas realidades laborales».
La mitad de los jóvenes no sabe qué es un sindicato
La desvinculación de los jóvenes no responde únicamente a falta de interés, el desconocimiento también juega un papel clave. Un informe encargado por la Unión Sindical Obrera (USO) revela que más de la mitad de los jóvenes (54,5%) no sabe exactamente qué es un sindicato. Entre los menores de 20 años y quienes cuentan con estudios básicos, la cifra es aún mayor. A esto se suma la percepción de que estas organizaciones son estructuras «anticuadas, burocráticas y alejadas de las problemáticas actuales», una idea que podría estar ligada a la falta de formación en derechos laborales o a la escasa presencia sindical en centros educativos y universidades.
El mismo sondeo de USO muestra que el 77,6% de los jóvenes ha hecho tareas que no le correspondían; el 70% ha sufrido sobrecarga laboral; y el 67% ha trabajado horas extra no remuneradas. Además, el 55% ha estado alguna vez sin contrato y el 51,5% ha desempeñado trabajos sin remuneración. Ante este panorama, la Confederación Europea de Sindicatos (CES) insiste en la necesidad de que las organizaciones se adapten a las sensibilidades juveniles y se acerquen a ellos desde etapas tempranas de su formación
15 años sin datos de Trabajo sobre los afiliados en sindicatos
La métrica con los datos oficiales de cuántos trabajadores están afiliados a un sindicato lleva quince años desaparecida de las bases de datos del Ministerio de Trabajo, ahora bajo la dirección de Yolanda Díaz. La última vez que se publicó fue en 2010, en la Encuesta de Calidad de Vida en el Trabajo, una estadística de carácter bianual que ofrecía una completa radiografía de cómo los asalariados españoles afrontaban su día a día, analizando cuestiones como su satisfacción laboral, horarios, dificultades para conciliar y, por último, su vinculación a los sindicatos. En aquel momento, la tasa de ocupados afiliados se situaba en el 16,4%, y fue el Gobierno de Mariano Rajoy el que eliminó en 2012 dicha encuesta por su elevado coste para sustituirla por la llamada Encuesta Anual Laboral, que ofrece menos detalles acerca de los sindicalistas y se centra en las empresas.
La ausencia de esta métrica oficial contrasta con las estimaciones más recientes disponibles por otras vías, que indican que la tasa de afiliación sindical en España ronda el 15% de los trabajadores asalariados. Según datos de la Comisión Europea, de los aproximadamente 21,8 millones de trabajadores en activo en España, unos 2,7 millones están afiliados a un sindicato, lo que refleja una desconexión significativa entre los trabajadores y las organizaciones que, en teoría, deberían representarlos.
