El mexicano 'fantasma' del Sabadell hace rentable su inversión con la opa hostil de BBVA
David Martínez supera los 375 millones desembolsados con la propuesta de compra que, previsiblemente, no prosperará
Edificio de Banco Sabadell. | Europa Press
El empresario mexicano y conocido en el mundo financiero como el ‘fantasma de Wall Street‘, David Martínez, ha hecho rentable en los últimos días su apuesta por Banco Sabadell, que comenzó hace ya más de diez años. Y lo ha hecho en pleno interés de BBVA por llevar a cabo unas negociaciones de fusión, que ha lanzado una oferta (opa) hostil. Tras sufrir durante mucho tiempo pérdidas latentes, en algunos momentos de importancia relevante, ahora encuentra una vía para recuperarlo por completo. Bien a través de acciones de la entidad vasca, que parece ser la opción elegida en la propuesta de las conversaciones según señalan fuentes financieras a THE OBJECTIVE, bien en efectivo una parte si finalmente se produce una operación de integración.
Martínez desembarcó en 2013 en el Sabadell. Lo hizo entonces en una mega ampliación de capital que lanzó el banco presidido por Josep Oliu para reforzarse. Desde entonces, ha desembolsado algo más de 375 millones de euros en distintas fases y se sienta en el consejo de administración. En la actualidad, ostenta un 3,56% del capital, siendo así el principal accionista de referencia. El fondo Blackrock, presente en innumerables compañías, tiene un 3,6% y Dimensional Fund posee un 3,1% y Millenium controla un 1%, según la CNMV.
La subida en Bolsa del banco en las últimas semanas y la propuesta de compra enviada por BBVA han catapultado la acción del Sabadell, que aunque está muy por debajo de sus máximos históricos sí está por encima de lo pagado por el mexicano, tanto en 2013, 2015 y 2019, las tres veces en la que ha decidido adquirir títulos de la entidad. El valor más alto pagado por Martínez fue 1,64 euros en su desembarco.
En la jornada de este martes, tras desvelar BBVA sus intenciones de retomar un proyecto de integración, la cotización del Sabadell alcanzó los 1,8 euros, tras escalar un 3,3%, aunque llegaron a subir más. Por tanto, los 200,3 millones de títulos en poder del empresario azteca superan los 360 millones. Pero hay que tener en cuenta que en 2018 vendió en el mercado casi un 2% de la participación.
Martínez al estar sentado en el consejo de administración será partícipe de la decisión que adopte el Sabadell. La entidad ya ha comunicado que analizará la propuesta remitida por BBVA. En el mercado, aunque consideran que ambos grupos tienen un encaje perfecto y serviría para fortalecer el sistema financiero español, se desconfía de que vaya a prosperar. Según señalan fuentes financieras el grupo vasco tendrá que ser muy generoso en su oferta. Se estima que estaría dispuesto a abonar una prima de más de un 20% siempre y cuando la integración se realice a través de un canje de acciones. En 2020, cuando fracasó el intentó para unirse, la propuesta más elevada fue un 30% sobre la cotización de entonces.
Pero las circunstancias han cambiado mucho desde entonces. Sabadell ha logrado sobreponerse de la situación en la que se encontraba hace cuatro años. De los 2.500 millones en los que valoraba BBVA en plena pandemia se ha pasado al entorno de los 12.000 millones actuales. Una cuantía que por tanto es un 380% superior, es decir, casi cinco veces más.
El banco catalán ahora se ve con fuerza para continuar en solitario y, de llevar a cabo algún tipo de operación corporativa sería en principio como banco comprador o predominante. De hecho se acercó el año pasado para explorar sus opciones para absorber Unicaja, cuando ésta aún tenía abierta la guerra interna. Por ello, diferentes fuentes conocedoras de la situación apuntan a que el consejo de Banco Sabadell se decantaría por no abrir el proceso para poder alcanzar un acuerdo y rechazar la propuesta, máxime cuando BBVA ni siquiera se había puesto en contacto para avisar de su intención con cierta antelación.
El precio ofrecido en su momento desencadenó el fracaso de la unión del que son el tercer y cuarto banco por negocio en España, además de tener franquicias ambos en México. El Sabadell, además, tiene presencia en Reino Unido; y BBVA, en Turquía, Argentina, Italia, Colombia y Perú. Pero otro factor que condicionó fue el reparto de poder. El presidente de la entidad catalana, Josep Oliu, llegó a estar dispuesto a jubilarse, pero el BCE se negó en rotundo a aceptar su salida, ya que quería para él un puesto de nivel por si su homólogo en BBVA, Carlos Torres, llegaba a ser imputado por el caso Villarejo.
