The Objective
Los 10 de 2025

Josep Oliu, el veterano banquero ganador de la mayor batalla empresarial de los últimos 15 años

El presidente del Sabadell ha logrado mantener la independencia del banco tras fracasar la opa lanzada por BBVA

Josep Oliu, el veterano banquero ganador de la mayor batalla empresarial de los últimos 15 años

El director del Banco Sabadell, Josep Oliu. | Ilustración de Alejandra Svriz

Es conocido como el banquero estratega, y este 2025 que termina, Josep Oliu ha hecho gala de tal apelativo. Se ha convertido en una de las personalidades del año por ser el ganador de la mayor batalla empresarial vivida en España en los últimos 15 años. El veterano ejecutivo ha logrado la hazaña de mantener el Sabadell en solitario tras año y medio de batalla con BBVA, que quiso hacerse con el control del catalán con su oferta pública de adquisición (opa).

Josep Oliu, en todo este periodo, desplegó toda una estrategia para salir victorioso de una pelea que en el mundo corporativo no se daba desde la lucha por Endesa, a finales de primera década del siglo XXI. A mediados de octubre, culminó la opa con un rotundo fracaso para BBVA, tras una hoja de ruta bien planificada e implementada por el Sabadell, aunque con algún sacrificio de por medio.

El plan liderado por el banquero catalán —siempre en comandita con el consejero delegado de la entidad, César González-Bueno— estuvo basado en articular una defensa numantina para que el Sabadell se mantuviera independiente. Para ello, se desplegó una batería de medidas, jugando con los tiempos, que pasaron por forjar un frente común contra BBVA con el tejido económico, político y social de Cataluña y otras comunidades autónomas, y ganarse el apoyo indiscutible del Gobierno central, que no veía con buenos ojos la operación de concentración.

Para no perder todo este respaldo, Josep Oliu devolvió la sede social del banco a su Cataluña de origen, en lo que fue el primer gran regreso de una empresa de la región desde la estampida provocada tras el 1 de octubre de 2017, cuando se celebró el referéndum de independencia. Y nunca lo perdió. El Ejecutivo de Pedro Sánchez torpedeó la transacción al impedir durante al menos tres años la fusión de ambas entidades.

El bloqueo del Gobierno no era suficiente para ganar la batalla, por lo que el banquero se vio obligado a sacar un conejo de la chistera para poder vencer: el Sabadell decidió hacerse más pequeño con la venta de su filial británica al Santander y ofrecer a sus accionistas 2.500 millones adicionales en dividendos.

En octubre, los inversores tomaron la palabra y Josep Oliu logró el milagro de mantener independiente el Sabadell de su vida, el banco al que llegó de la mano de su padre en 1986 y al que sucedería en el cargo de director general y consejero en 1991. Tras negarse en varias ocasiones al considerar que no estaba preparado, finalmente aceptó entrar a formar parte de la entidad.

Bajo su liderazgo, el Sabadell no solo se ha salvado de las garras de BBVA en dos ocasiones —la primera en 2020—, sino que se ha convertido en uno de los principales bancos del país. Cuando accedió a su dirección, era una entidad de ámbito prácticamente comarcal. En la actualidad, está presente por toda la geografía nacional e, incluso, opera en otros mercados, como México. Hasta marzo o abril de 2026, también lo hará en Reino Unido, una vez se ejecute la desinversión de TSB al Santander.

El gran salto de la entidad se produjo a partir de 1999, cuando Oliu fue nombrado presidente y empezó a adquirir competidores. Entre ellos, sobresalen el Herrero, el Atlántico, el Urquijo y la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM). Una retahíla de absorciones que han permitido expandir por todo el territorio a una firma que estaba concentrada en Barcelona y ofrecía servicios a los empresarios catalanes.

El banquero, amante de la música clásica y la equitación, en todo este tiempo ha ido aprendiendo el arte financiero, al que ha acompañado con capacidad negociadora y unas buenas amistades en el campo político labradas desde que se fue a estudiar a Estados Unidos en la juventud. Josep Oliu es uno de los miembros del denominado ‘clan de los minesotos’, un colectivo de directivos vinculados o cercanos a los gobiernos de José Luis Rodríguez Zapatero y Pedro Sánchez. Entre sus integrantes, por ejemplo, se encuentra la actual subgobernadora del Banco de España, Soledad Núñez.

Tras la victoria, posiblemente la más importante de su vida (tiene 76 años), Josep Oliu tendrá ahora que seguir desplegando su estrategia para que el Sabadell continúe en la élite de las finanzas. El principal reto en el corto plazo será llenar el hueco que dejará la filial británica en las cuentas, ya que esta aporta en torno al 20% de los beneficios. Y el desafío para el medio plazo será liderar una fusión con otro banco mediano, un proyecto que no termina de cuajar desde hace unos años.

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