The Objective
Energía

La SEPI decide trocear Duro Felguera y acerca el fantasma de la liquidación

El objetivo de la sociedad pública es aligerar la estructura productiva y salvar la mayor cantidad posible de empleos

La SEPI decide trocear Duro Felguera y acerca el fantasma de la liquidación

Sede de Duro Felguera en Gijón. | Jorge Peteiro / Europa Press

La Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) ha comenzado la venta ordenada de los principales activos de Duro Felguera, con el objetivo de salvar la mayor cantidad de empleos posible y a su vez intentar aligerar la estructura de la ingeniería asturiana, según ha podido confirmar THE OBJECTIVE. Un plan con la empresa al borde del concurso de acreedores y que en el sector se interpreta como el primer paso para una liquidación ordenada, si finalmente el Gobierno no se decide a facilitar el salvavidas económico que la compañía lleva meses solicitando.

El primer paso para ese desmantelamiento se producirá con la cesión de la factoría de El Tallerón a Indra. El presidente de la tecnológica, Ángel Escribano, indicó este jueves que van a comprar la fábrica de Gijón para hacer vehículos militares. Duro Felguera cuenta en esta ciudad con una factoría de calderería pesada especializada en la fabricación de recipientes a presión para la industria petroquímica y el sector nuclear. Según ha trascendido, la operación solamente incluiría hacerse cargo de las casi 150 personas en plantilla, pero no implicaría coste económico.

No será la única. Desde hace semanas se negocia la venta de DF Sistemas Logísticos a otra empresa asturiana y -según ha podido saber este diario- también está sobre la mesa desprenderse de DF Operaciones y Montajes; de la división de energía, que es la que tiene una serie de litigios y arbitrajes abiertos (como el de Argelia); y de la división de Mining & Handling, que se dedica a manejo de graneles sólidos en puertos y minería. Oficialmente, estas ventas son para generar liquidez y evitar la quiebra, pero la realidad es que si se desprenden de todos estos activos, Duro Felguera se quedará sin estructura operativa.

Cesión de Tallerón

En este sentido, las fuentes consultadas por este diario indican que la intención de la SEPI de trocear la compañía y dejarla con el menor tamaño posible, un claro síntoma de que se busca hacer una liquidación ordenada. Incluso advierten de que durante el concurso de acreedores (que se activará a partir del 11 de junio si antes no hay una solución) se podrían seguir ejecutando ventas para llegar al final de este proceso sin estructura.

Creen también que la SEPI ya ha descartado salvar a Duro Felguera tras fracasar sus negociaciones con la banca y los socios mexicanos, Prodi y Mota, para aplicar un paquete de salvamento conjunto. Este diario estimó en 300 millones el coste para el Estado si se incluía la conversión de 100 millones de préstamo participativo, el perdón de 20 millones de deuda con la sociedad pública, la inyección de 100 millones para seguir funcionando y otros 80 millones en avales para mantener viva la contratación.

No obstante, si el plan de desmantelamiento de la SEPI sale adelante, no será necesaria ninguna inyección, básicamente porque ya no quedará nada que salvar. El objetivo inmediato es intentar salvar el máximo de empleos posibles y colocar el mayor número de divisiones en otras empresas vinculadas con el sector público. El primer paso es la compra por parte de Indra de El Tallerón, una operación que, sin embargo, genera muchas dudas en el sector de la ingeniería.

La SEPI y Duro Felguera

El primer interrogante es el proceso mediante el cual la tecnológica se ha quedado con la factoría. Las fuentes consultadas hablan de que había sobre la mesa más propuestas de empresas privadas que ofrecían dinero por la fábrica, pero pese a ello la SEPI ha optado por cederla a Indra, al parecer a coste cero. Tampoco queda claro cuál es el papel de los socios mexicanos que, en teoría, estaban inmersos en la venta de inmuebles para obtener liquidez. A cambio, ahora han aceptado una cesión sin coste de uno de sus activos más importantes.

La otra gran duda en torno a esta operación son los planes de Indra. Según Escribano, la utilizarán para hacer vehículos militares y blindados… en una fábrica que era líder mundial en el mercado de fabricación de tanques y esferas para la industria petrolífera. Duro Felguera exportaba esos productos a las refinerías de todo el mundo y ahora no se sabe si se seguirá con este negocio para centrarse en algo totalmente diferente de lo que hacen hasta la fecha.

Con todo, estas mismas fuentes advierten del riesgo de que las principales divisiones de Duro Felguera terminen en manos de empresas públicas o relacionadas con el Estado, ya no solo porque la SEPI asumiría la pérdida de los 120 millones de euros que les prestó durante la pandemia (más otros seis millones del Principado de Asturias), sino que podría engordar de manera artificial compañías que quizás no tengan la experiencia ni las condiciones para albergar estos activos.

Publicidad