La Comisión Nacional la Energía sigue atascada en el Congreso y suma ya un retraso de 135 días
El plazo de enmiendas al proyecto sigue abierto y el Gobierno continúa alargando la puesta en marcha del organismo

Congreso de los Diputados. | Europa Press
El lanzamiento de la Comisión Nacional de la Energía (CNE) sigue atascado en el Congreso de los Diputados y ya suma un retraso de 135 días (cuatro meses y medio). La Mesa de la Cámara Baja mantiene el plazo de enmiendas abierto y los partidos del Gobierno (con su mayoría) evitan que se tramite. El pasado mes se cumplió un año desde que el Ministerio de Transición Ecológica anunció el anteproyecto de ley para restablecer este organismo clave en el sector energético.
El plazo de enmiendas se abre en la Mesa tras remitir en el mismo acuerdo el proyecto de ley a la comisión correspondiente. La principal pugna está ahora en saber qué consejeros serán los elegidos y qué presidente y vicepresidente. La energía es uno de los sectores que más interés despierta en las fuerzas nacionalistas, principalmente PNV y Junts. Y ambos quieren imponer sus candidatos, como así hicieron con los últimos nombramientos de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).
La nueva CNE tendrá como órganos de gobierno la presidencia y el Consejo, formado por nueve consejeros. Se han añadido dos nuevos miembros desde su anuncio el pasado año. De momento, se desconocen nombres para ocupar estos puestos, pero existe cierto consenso en que se planteen perfiles técnicos del sector para el nuevo organismo regulador, que no tendrá entre sus funciones analizar la competencia del sector, algo que se quedará en la CNMC.
Las grandes energéticas prefieren el modelo anterior (con los dos grandes sectores regulados -energía y telecomunicaciones- separados, además de la comisión de competencia). La razón de esto último es que esta estructura permite a la comisión de regulación de energía contar con más medios, ofrecer más atención y ser además más asequible. Un sistema que comparten la mayoría de los países de occidente, salvo Estonia, Nueva Zelanda y Países Bajos (donde hay una integración entre las salas de competencia y regulación).
«El restablecimiento de la CNE permitirá reforzar la capacidad institucional del regulador en un momento clave para la transición energética, respondiendo a las crecientes necesidades de especialización y eficacia derivadas del nuevo paradigma energético y regulatorio. El Gobierno cumple con su compromiso de recuperar la arquitectura institucional del regulador energético especializado existente en España hasta 2013 y presente en la mayoría de los países de nuestro entorno», aseguró el Gobierno el pasado septiembre cuando aprobó el proyecto de ley.
Futuros movimientos
El Gobierno trasladará a tres consejeros de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) a la nueva Comisión Nacional de la Energía (CNE). Fuentes conocedoras del asunto aseguran que los consejeros María Jesús Martín, Enrique Monasterio y Josep María Salas saltarán al nuevo regulador energético en cuanto este se ponga en marcha. Los tres perfiles cuentan con una dilatada trayectoria en esta área y son expertos en materia energética.
La estructura del nuevo organismo se parecerá a la de la CNMV (Comisión Nacional del Mercado de Valores), ya que contará con nueve consejeros, además de un presidente y un vicepresidente. En el regulador se espera que la CNE «comience bien desde el principio para que apenas se note la transición de un organismo a otro».
La CNMC tiene grandes frentes energéticos relacionados con la regulación (desde la retribución de las redes hasta un nuevo debate sobre su financiación). Esto se dará en medio de un cambio institucional sin parangón en años, ya que la competencia de energía de la CNMC va a pasar a la CNE. Por lo tanto, se puede dar el curioso escenario de que los nuevos consejeros (siete) y el nuevo vicepresidente y presidente de este organismo firmen una circular normativa diseñada por otros consejeros que se encontraban en la CNMC.