Fitch desmonta la nueva fiscalidad de Cataluña: «Sería negativa para el resto de regiones»
La semana pasada María Jesús Montero negó que el acuerdo del PSOE y ERC fuese un «un concierto económico»
Salvador Illa, presidente de la Generalitat de Cataluña. | Agencias
Fitch ha dado un duro varapalo al nuevo pacto fiscal de Cataluña que acordaron el PSOE con ERC para garantizar la investidura de Salvador Illa como nuevo presidente de la Generalitat. Según la agencia de calificación, este acuerdo será negativo para el resto de regiones que actualmente se benefician de los fondos de compensación, tiene pocos visos de prosperar en el Congreso y en el corto plazo no mejorará considerablemente la calificación de la deuda catalana.
Al comenzar su análisis publicado este fin de semana, Fitch Ratings indica que la reforma del sistema de financiación sería positiva para la solvencia de Cataluña, pero es poco probable que tenga un impacto inmediato en las calificaciones de su deuda. Dicho esto, «no esperamos que la reforma, propuesta por los partidos que apoyan la investidura del nuevo presidente de la región, se implemente en el corto plazo», ya que -indican- se necesita una mayoría en el Congreso de los Diputados de España para modificar las leyes de financiación regional, «algo de lo que carecen los partidos que apoyan esa reforma».
Al investir a Salvador Illa como presidente del gobierno regional, el Partido Socialista Catalán (PSC) acordó con ERC, proponer un nuevo sistema de financiación para Cataluña. El partido socialista que gobierna a nivel nacional (PSOE) ha respaldado el acuerdo firmado por los dos partidos catalanes, pero se enfrenta a la oposición de otros partidos, en particular del Partido Popular (PP), dice el informe.
Contribución solidaria
Con este sistema de financiación acordado,«la autonomía financiera de Cataluña sería mucho mayor que la de las regiones españolas bajo el régimen común, y más cercana a las de las comunidades autónomas del País Vasco y Navarra». Cataluña recaudaría y gestionaría todos los impuestos pagados en la Comunidad Autónoma y transferidos a ella, y compensaría al Estado español por las responsabilidades no transferidas.
Cataluña también reduciría su contribución neta a los fondos de compensación con otras regiones. La región actualmente contribuye más de lo que recibe porque es más rica que la media nacional. Pero según el acuerdo, la contribución solidaria de esta región no podría superar lo que recibe.
De esta manera, Fitch indica que la reforma sería positiva para las finanzas de Cataluña, «pero negativa para las regiones que actualmente se benefician de los fondos de compensación, porque Cataluña es un contribuyente neto considerable». Sin embargo, las métricas de deuda de Cataluña tendrían que mejorar drásticamente para que hubiera una mejora de la calificación, algo que consideramos poco probable en el corto plazo, advierten.
Financiación de Cataluña
Explican que el perfil crediticio individual (SCP) de Cataluña es ‘bb-‘ y su calificación de incumplimiento del emisor (IDR) de ‘BBB’ incorpora una mejora de cuatro niveles debido a la alta probabilidad de apoyo ad hoc del estado (A-/Estable). El SCP de Cataluña tendría que subirse dos escalones, a ‘bb+’, para activar una mejora de la calificación IDR a ‘BBB+’. En nuestra opinión, la reforma no reduciría la probabilidad de apoyo del gobierno central, ya que Cataluña seguiría teniendo acceso a los mecanismos de apoyo a la liquidez del estado.
La reforma del sistema de financiación es distinta de la absorción propuesta de la deuda intergubernamental de las comunidades autónomas en situación normal prestada con cargo al Fondo de Liquidez Regional (FLA) y al Fondo de Facilidad Financiera (FFF), incluidos 15.000 millones de euros en el caso de Cataluña. Esta medida reduciría la deuda directa total y los cargos financieros de las regiones, lo que sería moderadamente positivo para sus calificaciones.
El PSOE y ERC también llegaron a un acuerdo en julio para desembolsar 1.000 millones de euros en tres años, para que Cataluña asuma el control de Rodalies de Catalunya, la red ferroviaria de cercanías. El traspaso del control, de los trenes, de las vías y de la financiación se realizará de forma escalonada. «El impacto de este acuerdo sería neutro para las finanzas de Cataluña, ya que todos los flujos de caja se transferirían a Renfe, la empresa ferroviaria estatal nacional», dice Fitch.
María Jesús Montero
La semana pasada la vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, defendió que Cataluña tenga una «financiación singular», pero ha querido dejar claro que el acuerdo suscrito entre el PSC y Esquerra para la investidura de Salvador Illa como presidente de la Generalitat no supone «ni es un concierto económico» para Cataluña ni es «una reforma al uso» del sistema de financiación» autonómica.
«Es una fórmula que permite profundizar en el autogobierno al que Cataluña aspira y que considera importante para el desarrollo de sus competencias», ha añadido la ministra de Hacienda a preguntas de los periodistas en una atención a medios durante una visita al Ayuntamiento de Rota (Cádiz), desde donde también ha manifestado que en dicho acuerdo entre los socialistas catalanes y ERC «se contempla la solidaridad como eje y núcleo» del mismo, según recogía Europa Press.
