Telefónica eleva sus objetivos de ingresos y reduce su dividendo a la mitad en 2026
La compañía además ha prometido una reducción del apalancamiento hasta aproximadamente un 2,5x de la deuda neta

Marc Murtra, presidente ejecutivo de Telefónica | Agencias
Telefónica ha presentado este martes su plan estratégico para los años 2026-2030, Transform & Grow, con nuevos objetivos de crecimiento y el recorte del dividendo a la mitad a partir del próximo año (0,15 euros). El objetivo es crecer, pero con disciplina financiera, lo que implica que las líneas maestras presentadas se centren en una mejora orgánica más que en operaciones concretas. La compañía reconoce que ahora mismo el contexto regulatorio es complejo, pero confía en que en el medio plazo se abran oportunidades de consolidación y que estarán preparados para aprovecharlas.
En este sentido, el nuevo plan se compromete con una tasa anual media de incremento de entre un 1,5 y un 2,5% durante los años 2025 y 2028 para los ingresos y los beneficios operativos brutos (Ebitda), acelerándose hasta el 2,5-3,5% durante el periodo 2028-2030. Por su parte, el Capex (la inversión) se reducirá hasta aproximadamente el 12% en el periodo 2026-2028, disminuyendo
desde el primer año del plan, con una mayor disminución hasta aproximadamente el 11% para 2030.
El flujo de caja libre (FCF) base para guidance se prevé en un rango de 2,9-3,0 mil millones de euros en 2026, con una tasa anual media de incremento del 3-5% para el periodo 2025-2028. La compañía además ha prometido una reducción del apalancamiento hasta aproximadamente 2,5x de la deuda neta sobre EBITDAaL a 2028, respaldando un balance sólido con calificación de grado de inversión. Actualmente ronda las 2,8 veces.
Reducción el dividendo
Por otro lado, el dividendo en 2025 se queda de 0,30 euros por acción pagaderos en dos tramos, en diciembre de 2025 y junio de 2026 (0,15 euros por acción en cada tramo). Y en 2026 se reduce a la mitad, 0,15 euros por acción en efectivo pagadero en junio de 2027. El objetivo de remuneración para 2027 y 2028 se basará en un rango del 40- 60% del flujo de caja libre (FCF) base para dividendo (payout), pagaderos en junio del año siguiente. Para los dividendos pagaderos a partir de junio de 2026 la compañía deja la remuneración en el aire ya que se propondrán, en su momento, la adopción de los correspondientes acuerdos societarios oportunos.
El objetivo general del plan es impulsar su crecimiento y crear valor a largo plazo, así como de reforzar su liderazgo en sus principales mercados —España, Alemania, Reino Unido y Brasil— y acelerar su evolución tecnológica, operativa y comercial. La compañía indica que “se transforma para crecer con la misión de ofrecer la mejor experiencia digital a sus clientes y la visión de convertirse en una operadora europea de referencia mundial, con escala rentable”.
El plan apuesta por la eficiencia y la simplificación del grupo y de sus operaciones y se estructura alrededor de seis pilares estratégicos: ofrecer una experiencia de cliente de primer nivel, ampliar la oferta para clientes residenciales (B2C), escalar el negocio empresarial y de administraciones públicas (B2B), evolucionar las capacidades tecnológicas, simplificar el modelo operativo y desarrollar el talento.
Seis pilares
En cuanto a ofrecer una experiencia de cliente de primer nivel, se quiere mejorar el rendimiento de la red y la atención al cliente en todos los canales. La excelencia en el servicio y en la experiencia de cliente se considera crítica, y la compañía planea invertir significativamente en Inteligencia Artificial para potenciarla.
También se busca ampliar la oferta para clientes residenciales (B2C), reforzando la convergencia en España y Brasil, expandirla en Reino Unido y Alemania, e impulsar los servicios del ecosistema para mejorar la propuesta de valor, aumentar los ingresos B2C y la presencia en los hogares. Telefónica acelerará en convergencia y ecosistema digital, dos factores clave para el crecimiento.
Otro objetivo es escalar el negocio empresarial y de administraciones públicas (B2B), modernizando los servicios de comunicación en España y Brasil, abordando las oportunidades del segmento en Reino Unido y Alemania, y acelerando el crecimiento de los servicios digitales aprovechando Telefónica Tech y las Unidades Globales, así como nuestras relaciones locales con empresas y canales de comercialización.
Consolidaciones en Europa
El cuarto pilar es evolucionar las capacidades tecnológicas, invirtiendo en redes fijas y móviles, haciendo un upgrade en los sistemas de TI, y focalizando la innovación en tecnologías con potencial para mejorar nuestra cartera de productos, nuestro rendimiento y la propuesta de valor para los clientes. Del mismo modo, se simplificar el modelo operativo. Telefónica va a evolucionar hacia un modelo operativo de grupo simplificado, con mayor autonomía para los países y Unidades Globales enfocadas en funciones críticas y en la creación de valor a través de la escala. Y se desarrollará el talento, atrayendo y reteniendo a los mejores profesionales en todos los mercados, y fortaleciendo una cultura centrada en el impacto y la ejecución.
El plan no incluye oportunidades de consolidación, pero sí asegura que Telefónica estará preparada para las posibles oportunidades que se presenten hasta 2030. Es así como la operadora reafirma su compromiso con el desarrollo tecnológico del sector y de la autonomía estratégica europea, destacando que la falta de consolidación del mercado europeo de telecomunicaciones ha generado inversiones ineficientes frente a Estados Unidos y China, y una creciente dependencia tecnológica en áreas críticas.
Telefónica cree además que una eventual consolidación en sus mercados core (España, Reino Unido y Alemania) podría generar sinergias por valor de 18.000-22.000 millones, según analistas financieros y expertos del sector, valor en sinergias que se podrían repartir entre compradores, vendedores, clientes, inversiones e innovación.
        