MasOrange reduce sus pérdidas hasta los 186 millones en su segundo año tras la fusión
Los costes de la deuda de la operadora de telecomunicaciones se quedaron en 617,4 millones de euros

Meinrad Spenger, consejero delegado de MasOrange
MasOrange registró unas pérdidas contables —sin salida de caja— de 186 millones de euros al cerrar el tercer trimestre del año. El dato, que sigue lastrado por los costes financieros de su deuda, se compara positivamente con igual periodo del año pasado en el que el desequilibrio fue de 533,4 millones, según los estados financieros de la compañía a los que ha tenido acceso THE OBJECTIVE. Esto supone reducir en un 65% lo que la operadora se dejó hace 12 meses y se produce a punto de cerrar el segundo año de funcionamiento de la joint venture tras la integración de Orange y MásMóvil en abril de 2024.
Según las fuentes consultadas por este diario, todo parece indicar que -a falta de un mes para que cierre el año- cuando se publiquen los resultados anuales se experimentará una reducción en torno a estos parámetros. El año pasado, el desequilibrio hasta septiembre fue de 533 millones para cerrar 2024 con 582 millones de desbarajuste. Una situación que podría repetirse al cerrar este 2025 lo que significaría terminar con al menos un 60% menos de pérdidas acumuladas.
La compañía presentó sus resultados del tercer trimestre hace poco más de un mes, aunque solo incluyó ingresos, resultados operativos brutos (ebitda), datos operativos y apalancamiento, pero sin aportar mayores detalles sobre los resultados finales. Con todo, esa comunicación a los inversores MasOrange ya adelantaba que estaba mejorando sus parámetros gracias a su crecimiento comercial y a la mejora de su disciplina financiera.
Ingresos de MasOrange
Los ingresos crecieron un 3,7% hasta los 5.664 millones, principalmente gracias a la facturación por equipamiento -venta de móviles y todo tipo de dispositivos electrónicos- que se situaron en los 841 millones, un 18% más. Los ingresos por servicio se quedaron en 4.822 millones, un 1,5% de mejora y ya más en la línea del mercado de las telecomunicaciones. Para MasOrange esto supone un avance en su política de diversificación, con la que busca aumentar sus márgenes en venta de seguros, productos de electrónica y con la intermediación de publicidad, banca y Energía.
Por otro lado, los costes externos se situaron en 3.052 millones de euros en los nueve primeros meses del año, aunque en este curso se han producido menos costes de integración y hay más sinergias en marcha, por lo cual se ahorra más. En 2024 la compañía puso en marcha un expediente de regulación de empleo (ERE) lo que significó un importante impacto en sus cuentas. También se ha logrado reducir la deuda y, por tanto, se pagan menos intereses, lo que a la larga ha permitido mejorar los beneficios operativos.
De hecho, a igual fecha del año pasado se registró un ebit negativo de 80,3 millones frente a los 479,9 positivos registrados hasta septiembre de 2025. En tanto, el ebitda reportado llegó a los 2.171 millones, un 12,8% más. Los costes de reestructuración han pasado de 90,2 millones a los actuales 28,8, mientras que los laborales se situaron en 266,6 millones. Por otro lado, las depreciaciones y amortizaciones llegaron a 1.503 millones, los costes de la deuda se quedaron en 617,4 millones y los intereses del pasivo por arrendamiento se situaron en los 53 millones.
Vodafone y Telefónica
La deuda neta se ha reducido hasta los 12.503 millones, aunque la operadora ha refinanciado buena parte del pasivo con mejores condiciones de pago y mayor vida del apalancamiento. En mayo de este año, MasOrange obtuvo un total de 11.000 millones de un pool bancario con una veintena de entidades financieras. De ellos, 6.250 millones eran para mejorar el préstamo actual y 4.750 para sufragar la infraestructura de la nueva FiberCo que crearon junto con Vodafone.
Las pérdidas de MasOrange están en la línea del sector. Vodafone España perdió 138,1 millones de euros en el ejercicio fiscal de 2025 (1 de abril de 2024 a 31 de marzo de 2025), un leve descenso en relación con los 145,3 millones que se dejó en el ejercicio anterior. La compañía cumplió así su primer curso con Zegona tras la compra a Vodafone Grupo por unos 5.000 millones de euros en mayo de 2024, después de las pertinentes autorizaciones regulatorias.
En el caso de Telefónica, los resultados de los nueve primeros meses del año indican que perdió 1.080 millones de euros tras sacar de su perímetro de consolidación sus negocios de Argentina, Perú, Uruguay y Ecuador, unidades que se han vendido en el transcurso del año y que han reportado unos 2.000 millones. Un cúmulo de ajustes contables que aumentarán tras el cierre del ERE que en estos momentos se negocia en España. Precisamente, en el caso del mercado español, la compañía registró un ebitda de 3.422 millones, un 1% más.
