El Estado irrumpe en el consejo de la empresa del cohete PLD Space
La empresa aeroespacial se ha convertido en una sociedad anónima y se afianza el plan de que tenga más dinero público
Terremoto en la compañía privada española PLD Space. En las últimas semanas, la empresa se ha transformado en una sociedad anónima y el Estado ha entrado en el consejo de administración. A principios de noviembre, el brazo inversor del CDTI (empresa adscrita al Ministerio de Ciencia e Innovación), llamado Innvierte, se convirtió en uno de los siete consejeros de la empresa aeroespacial.
Mientras el Estado se sienta en el consejo, la empresa Valectra Global SCR, un vehículo de inversión de la alicantina Alzis, sale del mismo. Unas semanas antes de la entrada del Estado en el órgano de administración de la compañía, la ministra de Ciencia, Innovación y Universidades, Diana Morant, visitó las instalaciones de la empresa en Elche (Alicante). Desde allí, aseguró que «PLD Space iba a poner a España en una posición de liderazgo tecnológico en el sector espacial como nunca antes». Por otro lado, en el consejo también ha desembarcado Stornoway Investment, una sociedad afincada en Aragón, y se espera la llegada de dos consejeros independientes.
El Estado, según publicó este medio, ya ha inyectado 73 millones de euros en la compañía. Ha sido principalmente a través del CDTI -que ha invertido 20,2 millones de euros, para hacerse con un 23% de la compañía-, el ICO (Instituto de crédito Oficial) -que le prestó recientemente 10 millones de euros– y, por último, el Perte Aeroespacial, que le concedió 42 millones de euros en dos adjudicaciones.
Presencia estatal en PLD Space
El Estado se ha guardado un derecho para hacerse con un 20% de la compañía si esta no le devuelve esas decenas de millones prestados en un plazo de tiempo de pocos años. Un escenario que, sumado al 23% que ya posee, podría permitirle hacerse con el 43% de la tecnológica. Según publicó Cinco Días, la empresa explicó en su informe financiero anual que contemplaba la idea de que el Estado incrementase su porcentaje por ese contrato.
De hecho, en los pliegos del contrato para el lanzamiento de pequeños satélites se observa que PLD Space ofreció el 20% de su capital frente a Pangea, la empresa rival, que no puso sobre la mesa una hipotética entrada de capital estatal en el caso de ganar el contrato. Ese porcentaje es el que el Estado usará como garantía en caso de que la empresa ilicitana no le devuelva, vía royalties (pagos), el préstamo de este contrato, conocido como compra pública precomercial.
Por otro lado, un detalle llamativo fue que la empresa, al anunciar la inversión de 10 millones de euros en la base de lanzamiento de la Guayana Francesa, se denominó «operador no institucional» en lugar de empresa privada. En unos 15 meses (a finales del año que viene) esperan lanzar el primer vuelo del cohete Miura V, su gran proyecto. Hace unos días, el periódico Alicante Plaza publicó que la empresa había logrado una subvención de 4,7 millones de euros para desarrollar la turbobomba del cohete.
Dudas con los plazos
En el sector existen dudas sobre si PLD Space cumplirá con los plazos para lanzar a tiempo el Miura V. Según fuentes conocedoras, «la turbobomba es una pieza clave del motor, que impulsa el queroseno con la expansión de gases de la combustión. Un proceso muy complejo. Alrededor de ella gira el diseño del resto del motor. Es el elemento principal». Desarrollar este motor puede tardar, como mínimo, un año, según las mismas fuentes.
Se ha elegido a la empresa Deimos para el sistema de guiado, navegación y control del lanzador del Miura 5, según explica el medio especializado Fly News. Una noticia que confirma que no se usará el sistema de guiado del Miura 1, desarrollado por GMV, que salió del accionariado y que genera dudas sobre si se cumplirá el objetivo de usar el 70% de la tecnología del Miura 1 en el nuevo cohete.
Por último, y tal y como se observa en el Boletín Oficial del Registro Mercantil (Borme) del pasado miércoles 6 de noviembre, se modificó la totalidad de los estatutos sociales, pasando además el objeto social de la compañía a «la prestación de servicios de lanzamiento de artilugios espaciales, así como satélites, naves espaciales, experimentos científicos para cargas relacionados con la industria aeroespacial con el fin de facilitar el acceso al espacio mediante cohetes de sondeo y globos sonda».