Moncloa trató de evitar la multa de Bustinduy a las aerolíneas pero prefirió salvar la coalición
La Comisión Europea estudia la sanción de 179 millones de euros a las low cost por si afecta a las normas de la UE
El ministro de Consumo, Pablo Bustinduy. | Europa Press
El ala socialista del Gobierno de coalición trató de evitar la sanción de 179 millones de euros que el Ministerio de Consumo impuso a las aerolíneas low cost por «sobrecostes por el equipaje de mano». Algo que provocó incluso la movilización de la Abogacía General del Estado para adoptar una posición sobre la legalidad de esta medida. Sin embargo, al principal responsable de la multa y titular de Consumo, Pablo Bustinduy, no le intimidó la presión de sus socios e hizo efectiva la sanción hace unas semanas.
El círculo cercano a Presidencia y el resto de ministerios socialistas afectados por este asunto optaron por buscar estabilidad dentro de la coalición y evitar una crisis con su socio, Sumar, a pesar de que no defendían la medida que se había impuesto. El origen de este problema está, según explican fuentes jurídicas a THE OBJECTIVE, en el artículo 97 de la Ley de Navegación Aérea, que tiene un margen de interpretación alto y que permite que algunos jueces muy garantistas observen que ese artículo da derecho a los consumidores a introducir gratis cualquier tipo de maleta dentro de la cabina del avión.
Al acceder a las páginas web de las aerolíneas low cost se observa que presentan una serie de tarifas a la hora de comprar un billete. Una de las que ofrecen al cliente es la ‘básica’, que oferta el precio del billete más una bolsa o mochila que debe ir debajo del asiento del avión. El Ministerio de Consumo considera que esta tarifa no debería existir y que se debería introducir una en la que se permitiese una maleta de ruedas. Un escenario que se vuelve complejo porque supondría el fin de esta tarifa (que es lo que hace atractivo volar en este tipo de compañías aéreas) y, por ende, una subida del precio, y además supondría discriminar al consumidor español frente al resto de los de la Unión Europea, porque la tarifa desaparecería solo en nuestro país.
Impacto de la medida
Además, la multa de Bustinduy podría también afectar a la libertad de las empresas para establecer precios, lo que ha provocado que la Comisión Europea esté estudiando dicha sanción por si afecta al reglamento europeo 1008/2008, según sostienen fuentes jurídicas. Por otro lado, la sanción tiene también un impacto económico dentro de nuestro país, ya que las estadísticas del gestor público aeroportuario Aena sitúan a las compañías low cost como las más demandadas en España.
Según fuentes políticas, el Ministerio de Consumo pidió opinión a la Abogacía del Estado de su ministerio para reforzar su posición. No obstante, según las mismas fuentes, esta se formuló cuidadosamente para evitar un contratiempo jurídico. De hecho, ya existen precedentes en este organismo que han dado la razón a las aerolíneas. Este proceso lleva cocinándose más de un año en el que ha habido apertura de expedientes, recursos de alzada y hasta incumplimientos de los plazos por parte de Consumo.
El causante de la denuncia
El principal artífice de esta multa es la organización de defensa del consumidor Facua. «La ley dice que en España desde 1960 se puede viajar con el equipaje de cabina que necesites, y no pone límites. Por lo tanto, no puedes pagar un extra por ello porque ya lo has pagado al comprar el billete. No se trata de dejar entrar con una maleta pequeñita, eso no lo puede decidir la aerolínea mientras no haya una norma más específica», asegura la asociación a este periódico.
El resultado de esta denuncia se materializó hace unas semanas, el pasado 22 de noviembre. El Ministerio hizo pública su multa millonaria contra cinco aerolíneas low cost en España (Ryanair, Vueling, Easyjet, Norwegian y Volotea) como desenlace del expediente abierto en agosto de 2023. De entre todas las sanciones destacó una relacionada con el pago de un suplemento por el transporte de equipaje de mano en cabina. Aunque también hay otras, como «un sobrecoste sobre el precio del billete por la reserva de asientos contiguos o la imposición de una tasa desproporcionada y abusiva a los pasajeros por la impresión de la tarjeta de embarque».
