Inquietud en el sector aéreo por si AENA premia en exceso a Barcelona en su plan de inversión
Pronto se desvelará el DORA III, un documento clave para conocer el gasto que se destinará a los aeropuertos este lustro

El CEO de Aena, Maurici Lucena. | Europa Press
Preocupación en el sector aéreo por si el presidente de AENA, el catalán Maurici Lucena, va a premiar en exceso a su tierra con una inversión récord para el aeropuerto Barcelona-El Prat Josep Tarradellas en el próximo DORA (Documento de Regulación Aeroportuaria). Según fuentes del sector, se busca potenciar esta infraestructura porque se trata además de uno de los «hub» que más ingresos generan en la tesorería de la empresa participada en un 51% por el Estado.
Se trata del DORA III, que hace referencia al quinquenio 2027 a 2031 y que el pasado mes de abril Lucena aseguró que incluiría la expansión de grandes aeropuertos. Además, el pasado jueves, el ministro de Transportes, Óscar Puente, deslizó que la previsión de inversiones contempladas se desvelaría este mes. En la formulación de todas las inversiones participan AENA (que presenta las propuestas de planificación y necesidades y que es quien financia el programa a través de sus recursos), la dirección general de Aviación Civil (DGAC), la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA), entre otros. Finalmente, se aprueba en el Consejo de Ministros.
Desde hace meses, AENA -que está registrando beneficios inéditos en sus cuentas anuales- tiene una estrategia para impulsar los grandes aeropuertos del país -como Madrid, Barcelona, Málaga y Palma- porque son los que más ingresos le generan. Se busca convertir estas infraestructuras en una experiencia que vaya más allá de un mero lugar de tránsito de pasajeros. Esto se debe a que la empresa semipública logra grandes beneficios no solo gracias a las tasas que cobra a las aerolíneas, sino también a través de lo que recauda de los establecimientos que hay en los aeropuertos.
Revuelta en los pequeños aeropuertos
Pero esta estrategia tiene grandes perdedores: los pequeños aeropuertos del país. En los últimos días, varios territorios han mostrado su indignación por la política de la compañía que dirige Lucena. El pasado miércoles, el consejero de Presidencia, Justicia y Deportes de Galicia, Diego Calvo, denunció la actuación de AENA y pidió «un cambio de trato» en alusión a los tres aeropuertos pequeños y mediados gallegos (Santiago, La Coruña y Vigo).
Ese mismo día también, la vicepresidenta del Gobierno de Aragón, Mar Vaquero, criticó también a la empresa semipública para defender al aeropuerto de Zaragoza. Por último, la consejera de Turismo del Gobierno canario, Jéssica de León, cargó contra la gestión de Lucena porque su política estaba afectando al aeropuerto de Tenerife Norte.
Hace unos meses, el Consejo de Ministros aprobó una inversión adicional de 350 millones de euros a las programadas en el actual quinquenio inversor de AENA (el DORA II). Lo que provocó el enfado de algunas ciudades, como la de Jerez, porque no recibieron ni un solo euro de inversiones. Su alcaldesa, María José García-Pelayo, según recogió La Voz de Cádiz, aseguró que era una «malísima noticia, aunque desgraciadamente convertida en costumbre».
Enfrentamiento con sus clientes
Este malestar se ha acrecentado tras el enfrentamiento público que llevan varios meses manteniendo el gestor de los aeropuertos, AENA, y la aerolínea Ryanair. Recientemente, la compañía irlandesa anunció que abandonaba varias rutas en España y que recortaba un millón de plazas. El CEO de Aena aprovechó ese anuncio para atacar a Ryanair, además de asegurar que esas plazas las ocuparían otras aerolíneas. «El sistema aeroportuario español, que es un modelo de referencia en el mundo, no puede articularse en función de los caprichos, las mentiras y el egoísmo de una sola aerolínea».
Desde Ryanair contestaron: «Los aeropuertos y regiones españolas están sufriendo porque el monopolio de AENA sigue subiendo las tasas aeroportuarias, justo cuando muchos otros países de la UE eliminan impuestos a la aviación o bajan tasas para estimular el tráfico, el turismo y el crecimiento del empleo. El monopolio de AENA, dirigido por expolíticos como el señor Lucena, no entiende que hay que competir si se quiere crecer. Prefieren subir tasas y atacar a sus principales clientes, como Ryanair, en lugar de competir con otros países europeos reduciéndolas», señaló el CEO de Ryanair, Eddie Wilson.
«Maurici Lucena haría mejor en dedicar su tiempo a bajar sus tasas no competitivas en los aeropuertos regionales de España (casi al 70% vacíos) y a fomentar el tráfico en las regiones, en vez de lanzar notas de prensa emocionales, pero inexactas y hacer afirmaciones falsas sobre Ryanair, la aerolínea número 1 y la que más crece en Europa», añadió Wilson.