El emir de Dubai hizo secuestrar a sus hijas e intimidó a su mujer
Estas conclusiones de un juez londinense han llegado en el marco de una batalla legal entre Mohamed bin Rashid al Maktum y la princesa Haya
El emir de Dubái ordenó el secuestro de dos de sus hijas y llevó a cabo una «campaña de intimidación» contra una de sus esposas, la princesa Haya de Jordania, lo que la obligó a huir al extranjero, según ha dictaminado este jueves un tribunal británico.
Estas conclusiones de un juez londinense han llegado en el marco de una batalla legal entre Mohamed bin Rashid al Maktum, de 70 años, que también es jefe del Gobierno de los Emiratos Árabes Unidos, y la princesa Haya, de 45 años.
Esta última, que en 2004 se convirtió en la sexta esposa del soberano emiratí, causó sensación el verano pasado cuando llegó a Londres huyendo de su marido acompañada de sus hijos. Allí inició una demanda sin precedentes contra el emir, quien, según ella, se divorció en secreto a principios de 2019.
La princesa pidió al juez de familia de la Alta Corte de Londres medidas de protección contra un matrimonio forzado que podría implicar a una de las hijas de la pareja, solicitó protección para ella y reclamó la custodia de sus hijos. El jeque Mohamed bin Rashid al Maktum exigió, por su parte, el regreso de sus hijos a los Emiratos Árabes Unidos.
Ahora, en unas conclusiones sobre ciertos puntos del procedimiento, el juez ha considerado que el emir «actuó, a partir de finales de 2018, de una manera destinada a intimidar y asustar» a la princesa.
En el marco de este caso, la princesa Haya pidió asimismo a la corte londinense que se pronunciara sobre la suerte de dos hijas que el emir tuvo con otra de sus esposas, Shamsa y Latifa. Sobre ellas, el magistrado ha dicho que el jeque «ordenó y orquestó» su secuestro.
En un comunicado, el emir ha denunciado la sentencia, que afirma que «se refiere sólo a una parte del caso» y «no protege (a sus) hijos de la atención de los medios de comunicación», pidiendo que se respete la intimidad de su familia.
En marzo de 2018, Latifa al Maktum, de 32 años, anunció en un vídeo difundido por YouTube que quería huir de su país. Al borde de las lágrimas, dijo que su padre la había «torturado» y «encarcelado durante tres años» tras un primer intento de fuga cuando era sólo una adolescente en 2002.
Shamsa, nacida en 1981, había intentado huir de su padre en 2000 mientras estaba de vacaciones en Inglaterra, cuando tenía 18 años. Según el relato de Latifa, la chica fue encontrada tras dos meses de fuga, «drogada», devuelta a Dubai en un jet privado y «encerrada».