Nos han robado las pensiones
Nos han robado las pensiones y nos han impuesto un sistema público condenado al fracaso. El verdadero robo es el sistema actual.
Miles de pensionistas han salido a la calle por un quítame allá un IPC menos el 0’25 por ciento. ¡Qué desperdicio de manifestaciones! Si el robo del gobierno es de miles de euros al año, no de unos cuantos céntimos.
El sistema actual nos quita una parte muy importante de nuestro sueldo, más de un tercio, que se destina a pagar las pensiones actuales. Los que contribuimos vamos a menos, y los que perciben pensiones son cada vez más. Se pueden mantener las pensiones públicas haciendo que los que aún trabajen aporten mucho más. Pero las cotizaciones sociales son un impuesto al trabajo, y cuanto mayor sea, más se desincentiva el trabajo, y más injusto es el sistema. De modo que sólo queda dejar que el reparto de los sueldos de los trabajadores entre un número creciente de jubilados lleve inexorablemente a pensiones más y más bajas.
Las manifestaciones son parte de la melancolía que acompañará durante décadas a la decadencia inexorable de las pensiones públicas. Cuando tendrían que salir a la calle por el robo de nuestras pensiones. El verdadero robo, que es el sistema actual.
Si a los actuales pensionistas no les hubieran quitado las cotizaciones sociales, y si ese dinero, sin necesidad de hacer ingeniería financiera alguna, lo hubiesen invertido en el índice general de la Bolsa, la situación de los jubilados sería envidiable. Nos han robado las pensiones y nos han impuesto un sistema público condenado al fracaso.