Agamenón y su porquero
No estoy a favor de los concursos de belleza, pero menos aún de quienes se oponen a ellos por razones morales, o sea, por mojigatería.
No estoy a favor de los concursos de belleza, pero menos aún de quienes se oponen a ellos por razones morales, o sea, por mojigatería.
A los concursos de belleza se suelen oponer las feministas, pero ahora se les han unido las mujeres con velo que se manifiestan casi con ira en Indonesia exigiendo que se cancele el certamen de Miss Mundo. En un café, al ver la cara de disgusto que ponía Gide ante su perrito, una señora le preguntó: “¿Es que a usted no le gustan los animales?”. “Los animales sí, mucho; pero detesto a las señoras a las que les gustan los animales”, respondió Gide. Algo así siento al ver esta foto: no estoy a favor de los concursos de belleza, pero menos aún de quienes se oponen a ellos por razones “morales”, o sea, por mojigatería. A ver si ahora, frente a las del velo, van a ser las feministas las que defiendan el derecho de las mujeres a exhibir su “propio cuerpo” (siempre que dicen cuerpo anteponen propio, no se sabe bien por qué) para ser puntuadas por cuatro acartonados locutores de la tele. Cosas más chiripitifláuticas se ven a diario en nombre de la “liberación”, como denunciar el machismo enseñando las tetas (o sus “propias” tetas) por la calle. Estas indonesias con velo, ¿no protestan en cambio porque Inditex invada Indonesia para llenarlo de talleres en régimen de esclavitud? ¿Eso no es “inmoral”? Capaces serán de protestar sólo por los “inmorales” escotes de los modelitos de Zara.