Sangre en Siria, en México y en el FMI

«Lagarde me deja más tranquilo, dada la infalibilidad del FMI en sus previsiones», dispara uno de nuestros lectores

Que los islamistas vendan sangre de cristianos martirizados en Siria a 100.000 dólares la botella no ha dejado a la parroquia social indiferente. “Propio de una película de terror”, escribía @lidia_dean. “La estupidez humana infinita”, dice @caballecristina. “Se me ponen los pelos de punta”, confiesa @Mclmaz. “¿Y a pesar de esto, tolerancia?”, se pregunta @fjmoraartillo. Y “¿qué pasaría si la noticia fuera cristianos venden sangre de musulmanes?”, lanza @conchadelasota en Twitter.

Los grupos de autodefensa –civiles armados que luchan contra los narcos- sorprendían al mundo esta semana, enviando un mensaje a México a través de The Objective, en una entrevista en exclusiva: que no entregarán las armas hasta que detengan a los líderes de los Templarios. Al Efimeronauta le han llegado decenas de comentarios de los lectores sobre la entrevista. En Facebook muchos proponían oraciones por la paz en Michoacán, y allí Angelina Espinosa sentenciaba: “Rezar pero también participar, o estamos de un lado o del otro, porque tarde o temprano las circunstancias nos empujan”. Sobre la posibilidad de hablar de una “guerra civil” en México, @ArdianaLio reconocía que no se trata de algo nuevo: “Esas mismas palabras melas dijo una compañero de piso mexicana que tuve en Pekín. Allí había muchos mexicanos, todos preocupados”. 

Melchor Miralles y Hermann Tertsch abordaron esta semana el conflicto mexicano en sus respetivas columnas en The Objective. Al primero le replica @lauravandenb_: “¿Civiles? Yo también lo soy y no uso arma. Si eso hacen los civiles, imagina los narcos”. Y al segundo le escribía @floresfrio “Estimado Hermann, espero que no sucedan paralelismos en el comportamiento. ¿O es una preocupación?”. El propio @hermanntersch le respondía también en Twitter: “Que colapse el estado de derecho siempre es una preocupación. Ha sucedido en lugares insospechados en la historia”. 

Por último, la cabeza del FMI, Lagarde, predijo esta semana 7 años de bonanza económica. Fue portada de The Objective y sus palabras trajeron un sinfín de comentarios. Unos, más serios: “Crisis = redistribución de la pobreza + concentración de riqueza”, afirmaba @karmides. Y otros cargados de fina ironía. @sergioroyuela escribía: “Me deja mucho más tranquilo dada la infalibilidad del FMI en sus previsiones”. Y @MonsierSansFoy acudía a la imagen bucólica: “Lagarde se ha levantado hoy oliendo a primavera”. Leyéndolos a todos, noto un cierto pesimismo en torno al optimismo.

Te sigo leyendo. Te observo. Como Twitter.