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Nos la van colando por la puerta de atrás

El que fuera vicepresidente del Banco Mundial dice que la causa de la crisis financiera y económica es «el predominio del dólar”, como si se necesitaran varios cursos en escuelas de negocios carísimas para aprender a decir chorradas.

Opinión

El que fuera vicepresidente del Banco Mundial dice que la causa de la crisis financiera y económica es «el predominio del dólar”, como si se necesitaran varios cursos en escuelas de negocios carísimas para aprender a decir chorradas.

Gracias a The Objective, que se empeña -y lo logra- en sorprendernos con noticias de nuestro mundo, de más allá de nuestros pequeños límites nacionales, conocemos sucesos lejanos que llegan a cambiarnos la vida, manipular nuestra forma de pensar y nos roban la poquita libertad que nos queda…

El que fuera vicepresidente del Banco Mundial dice que la causa de la crisis financiera y económica es «el predominio del dólar”, como si se necesitaran varios cursos en escuelas de negocios carísimas para aprender a decir chorradas que suenan a complejas elaboraciones del pensamiento. Confundir causa con síntoma no deja de ser una muestra más de la verdadera causa de la crisis: la frivolidad, la inmoralidad, la falta de cultura elemental y de pensamiento y, sobretodo, la increíble capacidad de nuestros líderes para tomar el pelo a la sociedad, llegando a convencernos de que es mentira que no se puede engañar siempre a todo el mundo…

Lo peor de ello es que el gurú, atento a sus responsabilidades y obediente a quienes manejan los hilos, nos intenta colar lo que desde hace años es una consigna: necesitamos un Gobierno Mundial para solucionar los problemas de la naturaleza humana… ¡Y para ello propone una supermoneda!

Ya lo hicieron con la táctica del miedo, poniendo bombas y montando guerras para proponernos una paz controlada por los que organizan los conflictos si conviene. Y ya lo hemos comentado aquí sobre el espionaje a medio mundo organizado por la Administración de los Estados Unidos. El poder requiere más poder.

Podemos extraer una lección para empezar a mejorar nuestra nación, cuyos ciudadanos necesitamos un serio rescate: el de la patria y el de la libertad. Porque poco a poco, las marionetas y los que mueven los hilos, nos van colando por la puerta de atrás sus propuestas para dominarnos…