Paz, el mejor regalo
El líder espiritual de los budistas tibetanos opina que un buen corazón es la mejor religión, este es su deseo, bondad de corazón. Un buen corazón huye de la violencia, va en busca de la paz.
El líder espiritual de los budistas tibetanos opina que un buen corazón es la mejor religión, este es su deseo, bondad de corazón. Un buen corazón huye de la violencia, va en busca de la paz.
No podía dejar de llorar, echaba mucho de menos a los suyos, en especial a su madre a la que estaba muy unido. Así, llorando, pasó su primera noche Lhamo Thondup en el monasterio de Kumbum. Con apenas cinco años su vida cambió para siempre, el destino decidió por él, Lhamo Thondup sería el elegido para guiar y transformar la vida de millones de personas.
En 1937 una comitiva de Lamas viajó a la pequeña aldea de Takster en busca del nuevo Dalai Lama, encarnación de Thupten Gyatso, decimotercer Dalai Lama, y se dirigieron a la humilde casa de Lhamo Thondup.
El pequeño, lejos de impresionarse ante semejante visita, quedó prendado de un rosario que uno de los sirvientes llevaba colgado del cuello. Lhamo Thondup pidió al sirviente que se lo diera y este le respondió: ” te lo entregaré si adivinas quien soy”, el niño al que los ropajes del sirviente no habían engañado contestó: “tu eres Sera aga” que significa Lama de Sera. Lhamo Thondup no era un niño como los demás, Ketsang Rinpoche, alto Lama del monasterio de Sera, no logró confundirlo y quedó impresionado por la respuesta del niño.
Lhamo Thondhup, ahora Tenzin Gyatso , XIV Dalai Lama, cumplió 79 años el domingo pasado. No sabemos si tuvo tarta, ni si sopló velas, pero conocemos su mayor deseo. Lo compartió con todos los budistas de Birmania y Sri Lanka: el final de los actos violentos contra los musulmanes. Declaró que la violencia en estos dos estados, de mayoría budista, contra las minorías religiosas musulmanas era inaceptable.
El líder espiritual de los budistas tibetanos opina que “un buen corazón es la mejor religión”, este es su deseo, bondad de corazón, bondad del alma, bondad en nuestros actos, un buen corazón huye de la violencia, un buen corazón va en busca de la paz. Paz. Ese es el regalo que espera por su cumpleaños.