¿Qué quieres ser de mayor?

¿Qué quieres ser de mayor? ¿Cuántas veces nos han hecho esta pregunta? Con el tiempo nos dimos cuenta que no era todo tan sencillo como decirlo.

¿Qué quieres ser de mayor? ¿Cuántas veces nos han hecho esta pregunta? Bombero, futbolista, astronauta, médico, arquitecta, ingeniera, piloto de fórmula uno… Con el tiempo nos dimos cuenta que no era todo tan sencillo como decirlo. Los pensamientos y grandes ideas que no se traducen en acciones se pierden en el aire. Y ahí está a menudo nuestro problema: actuar. No se trata sólo de lo que quieres ser el día de mañana. La pregunta es ¿quién quieres ser hoy, aquí y ahora?

Coge un papel en blanco y un boli. Apunta todo lo que te gusta. Al detalle. Desde los macarrones gratinados de tu madre hasta quedar con tus dos grandes amigos para jugar a los bolos. Cosas pequeñas y grandes. Bailar sola en la habitación, cantar en el coche, escalar montañas, salir a correr, nadar, leer, recoger flores, tomar el café por la mañana. Escuchar a los demás, ir con tu pareja al cine. Todo ¿Lo tienes?

Ahora coge otro papel. Haz un esquema de tu semana, lo más detallado posible. La hora a la que te sueles levantar, todas las actividades que haces, aquello que sueles hacer. Cada semana y cada día son diferentes, está claro, pero seguro que puedes definir aproximadamente cómo es una semana estándar ¿Lo tienes también?

Por último, compara las dos hojas ¿Aquellas cosas que te gustan aparecen mucho o aparecen poco en el segundo papel? Si no aparecen demasiado podemos extraer dos posibles respuestas: uno, lo que aparece en la primera lista no te gusta tanto como crees. Eso sería un gran paso dado que te has conocido mejor y ya puedes empezar a elaborar una nueva lista que se ajuste realmente a tus gustos. Segunda opción, no estás haciendo suficientemente aquello que te hace feliz. Y si no lo estás haciendo, ¿qué estás haciendo? ¿A qué esperas? Respira, confía, actúa.