Los besos de la intolerancia
Siempre se habla de homofobia en países extranjeros pero, ¿qué ocurre en España?
Siempre se habla de homofobia en países extranjeros pero, ¿qué ocurre en España?
En la India cientos de gays, lesbianas y transexuales salieron a las calles de Nueva Delhi para celebrar el Orgullo Gay. Una marcha con valor en medio de una situación difícil, ya que la Justicia del país criminalizó las relaciones homosexuales a finales del año pasado. Siempre se habla de homofobia en países extranjeros pero, ¿qué ocurre en España?
Desgraciadamente hay mucho retrogada en nuestro país que sigue considerando que ser gay es un pecado o una desviación mental. Muestra de ello es lo que ocurrió la noche del domingo en el Burguer King de la Plaza de los Cubos, uno de los lugares más céntricos de Madrid. Una pareja formada por dos muchachos tuvo que marcharse del local después de darse un beso. ¿Por qué? Porque el vigilante se lo indicó. ¿Por qué? Porque una familia con niños se sintió molesta al verlo.
Cuando el problema es del ojo que mira lo lógico es no ceder. Aún hay gente que no comprende que ser homosexual es una forma de amar, no una perversión sexual. Y esas personas, de mente cerrada y actitud represiva, son quienes deben inculcar valores de respeto y tolerancia a los niños actuales. ¿Es una broma, no?
Lo que debería estar prohibido no es que dos personas del mismo sexo se besen en público. Lo que no debería tolerarse es que gente tan corta de miras acabe imponiendo su criterio simplemente por no comprender que el amor es libre, igual de libres que son ellos de levantar sus traseros homófobos del local y comerse las hamburguesas en la cueva de la que han salido.