El sol no sale igual para todos
El brote de Baltimore es el Frankenstein del sueño americano, construido sobre el egoísmo más primitivo del ser humano y las cenizas de otras naciones invadidas
El brote de Baltimore es el Frankenstein del sueño americano, construido sobre el egoísmo más primitivo del ser humano y las cenizas de otras naciones invadidas
El capitalismo determina la clase, por color de piel, por lugar de nacimiento, por apellidos, por linaje, por billetes. Un estigma que marcará la vida de cada uno.
La naturaleza no distingue eso. Los árboles dan frutas a mansalva, la lluvia proporciona sustento a cualquier ser vivo, hasta que llega un capitalista que canaliza ese imprescindible elixir de vida e impone sus impuestos.
El brote de Baltimore es el Frankenstein del sueño americano, construido sobre el egoísmo más primitivo del ser humano y las cenizas de otras naciones invadidas, edificado en el falso principio de ‘Si quieres puedes convertirte en Rey de la colina, siempre y cuando no seas negro o latino’.
La imagen del coche de policía destrozado tiene menos importancia que los que pululan a su alrededor: Unos bailan con gestos propios de la cultura exportable ‘Made in USA’ (aquí estoy yo, soy el más chulo y cool del barrio), mientras otro se afana a observar si en el interior del vehículo queda algún objeto digno de ser robado.
Que sociedad más patética… lo peor es que muchos otros países han seguido ese modelo. Y no surgirán brotes de lucha racial, todavía, pero el malestar por la crisis y la inmigración ilegal se escucha en cada cafetería de España, aunque siempre entre colegas porque no queda bien expresar lo que se opina en público. Todo tiene que ser de buen rollito, estilo ‘Podemos’.
La policía se defiende contra la violencia imparable en las calles de Baltimore o del Bronx, y la población negra reclama su lugar y un tratamiento igualitario. ¿Pero no eran capitalistas? El sistema dicta que si los blancos son más listos, tienen derecho a recibir más dinero y controlar el orden. A ver si con tanto igualitarismo y movimientos Gangsta Rap, van a poner el brazo en alto en lugar de sus paquetes y les van a maltratar como a Mecano en Nueva York.