El bucle pepero

Propongo a los dirigentes de Génova que se hagan esta pregunta: ¿Cómo reaccionarían si Rubalcaba hubiera seguido como secretario general del PSOE y dijera que quiere refundar el PSOE?

De un tiempo a esta parte quién más quién menos ha denunciado la necesidad de que el Partido Popular se renueve, se refunde, se regenere… Lo paradójico de esta denuncia es que cuando se ha realizado desde dentro del partido el denunciante podría ser tachado de muchas cosas pero nunca de refundador, regenerador o cosas por el estilo.

En este tema, como en tantos otros, el Partido Popular tiene una falta de credibilidad preocupante que determina que a ojos de cualquiera que no esté mezclado con el partido se genere desconfianza e incluso burla ante alguno de sus mensajes. Yo propongo a los dirigentes de Génova que se hagan esta pregunta: ¿Cómo reaccionarían si Rubalcaba hubiera seguido como Secretario General del PSOE y dijera: Quiero refundar el PSOE? ¿Cómo reaccionarían los ciudadanos en ese caso? Pues ocurre lo mismo cuando esos mensajes de refundación provienen de Esperanza Aguirre, de Mª Dolores de Cospedal, de Sáenz de Santamaría… o cualquier cara o nombre que resulte familiar en el PP. Todo ello por la sencilla razón de que es un partido que está sometido a una disciplina tan férrea que es imposible que se abra a lo que realmente ocurre en el seno de la sociedad española.

La dirección del PP apenas ha cambiado desde el año 2004. En 2011 las personas no depositaron su confianza en Rajoy, lo que hicieron fue largar a Zapatero para no verle nunca más. La estrechez de miras y el cortoplacismo que ha guiado la actuación del gobierno estos años obedece a ese bucle en el que ha entrado la dirección del partido donde las caras nuevas brillan por su ausencia y las pocas que se ven son prudentes porque saben que un paso en falso condiciona su entrada en la lista, o su sillón en Génova. No sé quién conseguirá que el PP salga de esa situación pero si alguna de las caras habituales se propone hacerlo deberá ser consecuente y desaparecer para que otros tomen el mando, de lo contrario seguirá en bucle.