Quiérete para los demás
La idea de que la delgadez es señal de perfección y salud es equivocada. Muchas modelos padecen trastornos alimenticios. Pero es que, además, ¿quién define la perfección estética?
La idea de que la delgadez es señal de perfección y salud es equivocada. Muchas modelos padecen trastornos alimenticios. Pero es que, además, ¿quién define la perfección estética?
En el Reino Unido han prohibido un anuncio de Yves Saint Laurent que mostraba a una modelo cuya delgadez las autoridades consideraron poco sana. Me parece bien. Siempre es más importante prevenir que curar. Sobre todo cuando cada vez son más las niñas, adolescentes e incluso jóvenes, que entran en ese mundo de Ana y Mia.
El problema es que quizás ya es un poco tarde y las modelos anoréxicas son solo un síntoma más dentro de toda la problemática que supone una enfermedad que se camufla en nuestras sociedades. En el fondo del problema radica una falta de autoestima, una no aceptación de uno mismo, unos conflictos personales no resueltos y un no saber interpretar las imágenes y la información que nos llegan.
La idea de que la delgadez es señal de perfección y salud es equivocada. Muchas modelos padecen trastornos alimenticios. Pero es que, además, ¿quién define la perfección estética? Las personas con problemas de anorexia suelen ser obsesivas y perfeccionistas, tienen dificultad para darse cuenta de sus estados emocionales y físicos internos (hambre, ansiedad, tristeza, etc.), introvertidas y poco sociales, padecen trastornos físicos y presentan una gran voluntad para controlar el hambre. Acaban viendo su estado y enfermedad con orgullo. Sin embargo, no se dan cuenta de que pueden llegar a la muerte.
Pero el problema grave de fondo es emocional. La anorexia es un síntoma del gran vacío que siente la persona que la padece, al igual que la fiebre es síntoma de que puedes tener una infección en el cuerpo. A veces la anorexia es la forma de responder a lo que no pueden expresar: la negación de la comida es negación de lo que sienten. Son incapaces de expresar sus sentimientos y lo hacen a través de la enfermedad. De ahí que lo preocupante no es solo la publicidad que vemos con modelos extra delgadas, sino el sentido que damos a la vida y cómo aprendemos a gestionar nuestras emociones y necesidades. “Cuando el hombre se mira mucho a sí mismo, llega a no saber cuál es su cara y cuál es su careta” (Pío Baroja). Nos urge construir personas seguras y sensibles cuya vida está tan plena que sirven con honestidad y alegría a los demás.