Scioli y Macri: más de lo mismo

Los herederos de esos destinos, después de la muerte de Kisrchner y Chávez o saben muy bien el rumbo que ellos hubieses tomado y todos los demás estábamos equivocados, o definitivamente se desviaron de su camino

Argentina está en una encrucijada muy particular: lo mismo o más de lo mismo. El kirchnerismo que otrora representara algún giro o pincelada a la izquierda dentro del peronismo ambiguo y pragmático, hoy vuelve por sus propios rieles al camino que nunca dejó de tener. Quizá la cercanía de Kisrchner con Chávez y el momento histórico de confrontación con el Alca vistió a Ernesto y a Cristina con el halo de esperanza de que eran parte de una revolución sin regreso, a favor de “los descamisados”, de “los alpargatuos”, de “los sin tierra”.

Sin embargo hoy es distinto. Los herederos de esos destinos, después de la muerte de Kisrchner y Chávez o saben muy bien el rumbo que ellos hubieses tomado y todos los demás estábamos equivocados, o definitivamente se desviaron de su camino.

Recientemente Noam Chomsky, máxima representación internacional de la izquierda estadounidense y permanente referente de estas “revoluciones latinoamericanas” ha sido lapidario en una entrevista: “La corrupción fue tan grande en Sudamérica que se desacreditaron a sí mismos y desperdiciaron grandes oportunidades” y Argentina no es la excepción, agregaría yo.

Por eso podemos lamentar que Scioli, que no representa nada, sea el candidato del kisrchnerismo que si representó algo para estas “revoluciones” latinoamericanas, pero lamentamos aún más que el propio pueblo argentino se dio como una “nueva opción” a lo más burdo de la derecha argentina, Macri tampoco significada nada para el pueblo latinoamericano, pero lo más dramático es que cualquiera que gane, empezará a representar algo para nuestros pueblos: más de lo mismo y la derrota temporal y anticipada de una revolución que no terminó de nacer en Argentina.