Sobran 21

Nunca he intervenido en conversaciones de paz. Alguna vez me ha llamado un amigo para ayudarle a resolver un problema familiar. Pero tengo mala experiencia, porque cuando las cosas se han enconado, los argumentos de una y otra parte se remontan a los orígenes: «es que tú no sabes que el padre de ese, un día…»

Y te cuentan lo que pasó un día y el otro te cuenta lo que pasó otro día y el pobre mediador se desespera, preguntándose: «estos dos, ¿querrán realmente ponerse de acuerdo o en el fondo se lo pasan bien riñendo?»

Veo la foto de la cumbre de paz en Viena, para arreglar un conflicto en el que los que no se ponen de acuerdo son:

1. El presidente al Assad y su ejército.
2. Los rebeldes, que se creyeron que la primavera árabe era coser y cantar.
3. Los kurdos, que aprovecharon el lío para hacer valer sus derechos en Turquía y Siria.
4. El Estado Islámico, que se ha quedado con un trozo de tierra y alguna ciudad que otra y ha dicho que así se empieza un Califato.
5. No sé si alguien más.

A ninguno le importa nada matar gente. Y a ninguno le importa nada que la gente salga corriendo intentando escaparse del infierno en el que han convertido Siria. Y los pobres refugiados andan como pueden por Europa intentando hacer una cosa muy simple: sobrevivir.

John Kerry, Secretario de Estado americano, convoca una reunión. Digo que la convoca porque le veo presidiéndola. Cuento los participantes y me salen 23. Detrás de ellos, mucha gente. Deben ser secretarios, asesores y así. Rusia y Estados Unidos nos han invitado, y allí estamos.

Quieren cuatro cosas:

1. Acelerar el proceso político, frase que traduzco al castellano y me sale que quiere decir echar a al Assad, como condición sine qua non.
2. Como consecuencia, cese de las hostilidades.
3. Y, como otra consecuencia, la más importante, garantizar el acceso a la ayuda humanitaria en Siria.
4. Y otra consecuencia, tan importante, que los sirios puedan vivir en Siria.

Las tres reuniones anteriores fracasaron. No sé si esta va a ir mejor. En confianza, de las 23 personas, me sobran 21. No entiendo de estas cosas, pero me parece que hay que conseguir que se pongan de acuerdo Rusia y Estados Unidos, y que a los restantes se les informe después.

Con los kurdos creo que se puede hablar. Con los del Estado Islámico, por lo que parece, no.

Pero si se arregla el lío Assad-rebeldes, solo (¡!) quedará el lío con el Estado islámico, del que también tendrán que ocuparse Rusia y Estados Unidos.

Siguen sobrándome 21.